None
PREOCUPACION DE LAS AUTORIDADES

El 18% de los bonaerenses sufren depresión

La semana de la Salud Mental en la Provincia comenzó el 10 de octubre.

Las consultas médicas por depresión y tras tornos de ansiedad crecen sin pausa. Pese a que comúnmente la salud mental suele asociarse a patologías complejas como la locura, se estima que estos trastornos “menores” afectan a un 18 por ciento de las personas adultas.
Los especialistas sostienen que el cuadro médico se agudiza si las patologías no son detectadas y tratadas en forma precoz, y se complejiza aún más cuando el paciente consume alcohol o drogas ilegales.
En el Día Mundial de la Salud Mental, que se celebró este 10 de octubre en más de 100 países, el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires propuso abordar la problemática desde una perspectiva integral –con fuerte énfasis también en las patologías de salud mental de menor complejidad– y con eje en la accesibilidad a los servicios de atención primaria en la comunidad.
De hecho, la Dirección de Salud Mental del Ministerio de Salud ha declarado del 10 al 17 de octubre la Semana de la Salud Mental en la provincia de Buenos Aires, bajo el lema: “Salud Mental en la Atención Primaria: fortaleciendo la promoción, prevención y tratamiento”.
El acto central de la Semana de la Salud Mental -que incluirá diversas actividades y capacitaciones-, se llevará a cabo hoy a las 10 en el hospital “El Dique”, de la localidad de Ensenada. En el acto están presentes autoridades del Ministerio de Salud, directores de regiones sanitarias y hospitales, jefes de servicios de salud mental, secretarios de salud municipal y representantes de ONG’s.

Un problema global

Los trastornos de la salud mental afectan a 450 millones de personas de todas las edades y niveles socioeconómicos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) sostiene que la depresión profunda será en los próximos años la segunda causa de discapacidad a escala mundial.
El director de Salud Mental del Ministerio de Salud provincial, Aníbal Areco, estimó que en la provincia de Buenos Aires los trastornos depresivos afectan a un 10 por ciento de la población mientras los trastornos de ansiedad (ataques de pánico, estrés postraumático, fobias e insomnio) alcanzan a un 8 por ciento.
Este 18 por ciento está en línea con las estimaciones de la OMS que indica que a nivel mundial depresión y trastornos de ansiedad ya afectan a entre el 15 y el 20 por ciento de la población mundial.
 “En nuestro país, la crisis de 2001 marcó un quiebre respecto de las patologías de salud mental. La pérdida del empleo, la salida del país de muchas personas buscando una mejora laboral en otras latitudes y, especialmente, el horizonte de incertidumbre sobre la situación del país multiplicaron en poco tiempo las consultas por trastornos de depresión y de ansiedad”, explicó Areco.
“Aún hoy, se cuentan por miles las personas que no han podido recuperarse de aquella situación. El temor sigue presente y la reciente crisis financiera internacional también ha tenido influencia”, señaló el profesional.
Según dijo, socialmente suele pensarse a la salud mental como un problema asociado sólo a la insanidad, cuando en realidad las patologías consideradas “duras” (como la psicosis, la esquizofrenia o autismo) afectan a entre el 3 y el 5 por ciento de la población.
Así, según destacan los especialistas, la depresión y los trastornos de ansiedad son “invisibles” para muchas de las personas que los padecen. “Hay un duelo lógico de tristeza y angustia que sigue a un accidente, a la disolución de los lazos familiares, a la pérdida de un ser querido o de un empleo pero tiene un límite en el tiempo” explicó Areco. Indicó que si la situación se sostiene indefinidamente es necesario realizar una consulta médica.

Más grave

Es que si la patología no se detecta y aborda precoz-mente puede derivar en cuadros mucho más graves que pueden derivar incluso en intentos de suicidios. El abuso de drogas complejiza aún más el problema y puede conducir a cuadros psicóticos y maníacos.
Un estudio de la Comunidad Económica Europea sostiene que el 25 por ciento de las personas será afectado a lo largo de su vida por algún trastorno de salud mental. La depresión y los trastornos de ansiedad se tratan con psicoterapia (en forma ambulatoria) y, sólo de ser necesario, con psicofármacos.
Según dijo Areco, a través del tratamiento terapéutico con abordaje psicológico el paciente con depresión experimenta mejoras notorias en un plazo 20 a un mes y en un máximo de 60 días la rehabilitación suele ser completa. No obstante, aclaró que “una vez rehabilitado el paciente debe seguir el tratamiento con controles más espaciados para evitar posibles recaídas”.

COMENTARIOS