Encolumnados detrás de una bandera que pedía “basta de femicidios y justicia para Maruja Chacón y Shirley Barrientos”, representantes de la comunidad peruana en La Plata y de organizaciones sociales y de género marcharon hasta las fiscalías, a la par de algunos allegados a las víctimas. Mientras tanto, el principal acusado de matarlas, Hugo Orlando Hidalgo (40), se mantiene prófugo.
Se cumplieron ayer sábado dos semanas desde que Maruja, de 50 años, y su hija, de 15, fueron vistas vivas por última vez, desde aquel día en que anunciaron que iban a la casa de un amigo en Punta Lara y se les perdió el rastro. El martes pasado sus cuerpos fueron encontrados enterrados en aquella vivienda a la que habían sido invitadas, en Almirante Brown 319, en Punta Lara.
Estaba previsto que el viernes se hicieran las autopsias, pero ese estudio recién podrá hacerse este domingo, ya que los cortes de luz por el temporal impidieron que los cuerpos recibieran el frío necesario para poder ser analizados, explicaron los investigadores. Ese estudio será clave para despejar dudas, como la mecánica de los crímenes, cuándo ocurrieron y si las víctimas fueron violadas, como se presume.
En las últimas horas llegaron al país los dos hijos mayores de Maruja, quienes viven en Perú y fueron recibidos por el cónsul de ese país en La Plata, Carlos Alberto Chocano Burga. Este diplomático ha estado en permanente contacto con los pesquisas locales, ya que sirvió de nexo entre éstos y los familiares.
A la movilización la convocó el Consejo de Consulta de Perú en La Plata, que llamó a las organizaciones y los ciudadanos de esa colectividad a concentrarse desde las 11 de la mañana frente a las fiscalías de 7 entre 56 y 57.
CRIMENES EN PUNTA LARA
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