Echaron a Montoya del Gobierno

Las críticas que lanzó contra el kirchnerismo, al que acusó de "haber perdido la capacidad de escuchar a la sociedad", forzaron finalmente a Santiago Montoya a renunciar a la Agencia de Recaudación Bonaerense (ARBA).
El gobernador Daniel Scioli le pidió que dejara el cargo y el recaudador no tuvo opción. A la tarde le entregó en mano la carta de su renuncia al ministro de Economía, Rafael Perelmiter, quien será su reemplazante en el organismo recaudador.
La salida de Montoya fue la crónica de un final anunciado que sólo se demoró algunas horas por la resistencia que un sector del Gobierno provincial esbozó para no aparecer entregando la cabeza del recaudador ante la ira que sus declaraciones despertaron en el ex presidente Néstor Kirchner.
El incidente que terminó con la renuncia de Montoya arrancó con el rechazo público del ex titular de ARBA a presentarse como candidato "testimonial" a concejal por San Isidro. "Siento que en los últimos tiempos desde el oficialismo hemos perdido parte de la capacidad de escuchar a la sociedad, a los líderes opositores, a los distintos sectores sociales y productivos del país", dijo, cuestionando las candidaturas "testimoniales".
Esas declaraciones, plasmadas en una carta, generaron la reacción de la Casa Rosada y del propio Daniel Scioli, ya que, más allá de que las críticas apuntaban directamente al kirchnerismo, los cuestionamientos terminaron alcanzando, en definitiva, al mandatario bonaerense, debido a que es el más ferviente defensor de la estrategia de las candidaturas "testimoniales".
El enojo de Scioli no alcanzaba, sin embargo, para pedirle la renuncia a Montoya. Por eso, para calmar la bronca de Kirchner, le exigió al recaudador que hiciera una rectificación pública. Montoya redactó una nueva carta en la que dijo que lamentaba "profundamente los malen-tendidos", pero amplió su "opinión autocrítica acerca de la política nacional y la necesidad de escuchar más a la gente".
Ese comunicado, conocido en la noche del jueves, selló la suerte de Montoya y ayer terminó presentando la renuncia.

Carta de renuncia

El ex titular de ARBA dimitió a través de una carta que le entregó en mano a Perelmiter en una reunión que mantuvieron a la tarde en la sede porteña del Banco Provincia. En la nota dirigida al Gobernador, destacó que desde el organismo recaudador llevó a cabo una "tarea titánica" y afirmó que "desgraciadamente" se ve "obligado" a dejar el cargo.
El ex funcionario dijo que se va con la satisfacción de que justo el día de su renuncia "ARBA ingresó 303 millones de peso al tesoro, la máxima recaudación diaria de la historia de la Provincia". Montoya remarcó en ese sentido que "el plan anticrisis que lanzamos en marzo está funcionando a pleno" y agregó: "ARBA está desafiando la crisis, como me comprometí".
El tramo final de la carta lo dejó reservado al plano político. Aseguró que "aparentemente los motivos por los cuales usted (el Gobernador) me pide la renuncia están relacionados con ciertos comentarios políticos que produje al verme involucrado en versiones acerca de una candidatura que no me había sido formalmente ofrecida".
Montoya dijo que lamenta "profundamente" el desenlace, ya que no tuvo la intención de "provocarle inconvenientes de carácter político" al Gobernador.
Y sostuvo que "así como los jueces hablan a través de sus sentencias, en mi tarea de recaudación creo que los números constituyen la evidencia contundente del tamaño de mi compromiso político con su gobierno y la gobernabilidad del país".
El reemplazante de Montoya será el ministro Perelmiter y la salida del recaudador bonaerense provocó otros movimientos en el gabinete bonaerense.
En tanto, al explicar la salida de Montoya, en el gobierno provincial dijeron que los funcionarios deben reunir "dos condiciones": capacidad técnica y responsabilidad institucional. Mon-toya cumplía sobradamente con el primer requisito, pero falló con el segundo.
"Hacer declaraciones políticas como las que hizo no tenía nada que ver con la función que le había asignado el Gobernador", afirmaron los voceros.