La reforma previsional de Scioli llega a Diputados

El gobernador Daniel Scioli envió ayer a la Cámara de Diputados el proyecto de ley de reforma del sistema previsional que implicará cambios en el control de gestión financiera en el Instituto de Previsión Social (IPS) y las Cajas jubilatorias de la Policía y del personal del Banco Provincia.
El proyecto incluye, además, una serie de artículos que conllevan cambios en los aportes y requisitos para la jubilación de los empleados del Banco Provincia ya anticipados y, como novedad, la previsión de que los aportes del personal se efectuarán sobre la totalidad de las remuneraciones percibidas.
La reforma global impulsada por el Ejecutivo apunta a crear un subsistema financiero previsional, que implicará cambios en el control de gestión financiera en el IPS (que nuclea a docentes, administrativos, municipales y Servicio Penitenciario) y las Cajas jubilatorias de la Policía y del personal del Banco Provincia.
El texto enviado a Diputados dispone que cada subsistema mantendrá su independencia financiera y no se utilizará el superávit del IPS para cubrir el déficit eventual de las Cajas de la Policía y del Bapro. Y establece, en ese sentido, que la Provincia cubrirá con recursos propios el déficit de la Caja del Bapro (por la suma de hasta 100 millones de pesos) hasta tanto se reciban los fondos que debe enviar el gobierno nacional.

Emisión de bonos

En el proyecto de ley, el Gobierno solicita autorización para emitir bonos “de ordenamiento del sistema previsional” por hasta 2.000 millones de pesos, destinados a “blanquear” la deuda que la Provincia tiene con el IPS, por haber utilizado los fondos correspondientes al superávit de ese Instituto y habilita al Ejecutivo a seguir utilizando esos “excedentes” siempre contra la emisión de bonos en favor del IPS.
En ese sentido, el ministro de Economía, Rafael Perelmiter, afirmó que “cuando la Provincia use recursos del IPS, va a exponerlos mediante un bono, que va a pagar intereses, que va a estar garantizado el 100% con coparticipación federal”.
En declaraciones realizadas ayer, Perelmiter volvió a defender los cambios impulsados y dijo que “no es una reforma previsional del sistema sino un reordenamiento”, con el que “no se afectarán derechos de los actuales ni de los futuros jubilados”.

Crítica gremial

En tanto, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) criticó el proyecto porque considera que “va en detrimento de la autonomía de las cajas previsionales” y el gobierno provincial “deslinda responsabilidades y hace cargo a una de las cajas, casualmente la mejor administrada, de las funciones que debería cumplir el Ejecutivo”.
El informe gremial señala que con la iniciativa impulsada “se legaliza no sólo su injerencia (del Ejecutivo) sobre la autonomía de las tres cajas en cuestión, sino la de una (el IPS) sobre las otras”.
Para este sindicato, el objetivo es crear “un mecanismo que permita utilizar los fondos de la caja super-avitaria para financiar los déficits de los sistemas deficitarios, que debería aportar el gobierno nacional”.