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ALERTAN POR CONFLICTOS Y VANDALISMO A LA SALIDA DE LOS BOLICHES

Gregorio González: “La inseguridad sigue igual”

Los arrebatos son la preocupación mayor. Las arterias más comprometidas son Padre Respuela y Comandante Acha. También hay dificultades con el tránsito. Piden obra de asfalto, reconversión lumínica y mantenimiento de baldíos.

Hace años que los vecinos del barrio Gregorio González perdieron la tranquilidad que supieron tener, y por eso vienen haciendo reclamos de manera constante.
Es que este sector de la ciudad está delimitado en dos de sus márgenes por las avenidas Benito de Miguel y Circunvalación, donde se encuentran varios de los lugares de esparcimiento nocturno de la ciudad.
Por tal motivo, los residentes padecen los problemas que surgen a la salida de los boliches. Autos corriendo, música a todo volumen, peleas y vandalismo son una constante de cada fin de semana. Se trata de una problemática de larga data.
“No cambió en nada”, comenta resignada la presidenta de la sociedad de fomento, Dora Garbe, para luego enumerar: “La gente vive quejándose, les rayan y rompen los autos, tiran piedras en las ventanas, rompen vidrios, usan las veredas de baños”.
Es evidente la impotencia de los lugareños frente a esta situación. “Hemos tenido reuniones con (el secretario de Seguridad Víctor) Knappe, con Osvaldo Giapor cuando estaba en el tema de la seguridad, pero no cambió en nada”, agrega Garbe.
Inseguridad
La situación de los boliches es sólo una de las aristas de la inseguridad que se vive en la zona.
Otro punto sobre el que los vecinos plantean su preocupación es el de los arrebatos. “La inseguridad sigue igual –dice Garbe– los arrebatos siguen, principalmente en la zona de la Iglesia, sobre Padre Respuela, y en Comandante Acha”.
Con todo, si bien reconocen que hay patrullajes y que se ve la presencia policial, remarcan que esta problemática “no mejoró”.

Tránsito
El tránsito es otro de los temas que inquietan a los lugareños.
Entre las zonas más calientes, se encuentra la calle Comandante Acha, que se asfaltó hace un tiempo y “sirvió para que la gente la tome como una pista de carreras”. Además, “Roque Vázquez se complica con la salida del Colegio, aunque ahora vienen inspectores; lo mismo en Canavesio, por la salida del secundario; y Firpo por la salida de los chicos del jardín de infantes, donde deberían poner un semáforo o ir inspectores también ahí”.
Finalmente, para Garbe, “el tema de Benito de Miguel y de la Circunvalación con las motos parece que no tiene solución”.

Infraestructura
En la actualidad, Gregorio González está totalmente cubierto con los servicios de agua corriente y cloacas, mientras que solo resta conectarse a la red de gas natural un 10% del barrio.
En tanto, el alumbrado público es un servicio que “mejoró”, dado que “se agregaron algunas luminarias en cuadras que no había, y cuando se rompe algún foco vienen enseguida a cambiarlo”. No obstante, desde la sociedad de fomento están pidiendo una reconversión lumínica para que los colgantes se reemplacen por columnas.
En cuanto a las calles del sector, todavía hay “unas 25 cuadras que son de tierra, incluida la colectora”.
Si bien los fomentistas solicitaron una entrevista con las autoridades comunales para ver en qué estado está el pedido de pavimentación que ya se hizo, todavía no tuvieron respuesta.
Coria explica que las calles de tierra tienen dificultades: “Cuando llueve mucho, algunas se inundan de lado a lado. No sabemos si el problema es de desagües, pero hay algunas cuadras que se llenan de agua. Las máquinas pasan, pero poco. Hay calles que tienen baches y pozos importantes. Creo que el problema se solucionará el día que venga el asfalto”.
La falta de mantenimiento de baldíos es otro punto de discordia: “La gente no mantiene los lotes. Notamos que al lado del jardín de infantes hay un terreno y los vecinos hacen la poda y mantienen limpias sus propiedades, pero tiran los desechos los tiran ahí, son importarles que hay una institución al lado”.
Respecto de la limpieza, sostienen que el camión recolector de ramas pasa, pero se lleva sólo una parte de lo que tiene para juntar. “En esta época donde la gente poda, cuando llueve se tapan los desagües y, por consiguiente, se inundan las calles”, concluyen.

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