Tres robos en comercios de nuestra ciudad

El comienzo de año en nuestra ciudad evidencia síntomas de agravamiento en materia de inseguridad urbana: un crimen (el de Paola Tomé); un presunto abuso sexual; el drama de las “picadas” de motos; y una seguidilla de robos y arrebatos en las calles son sólo algunos ejemplos.
De hecho, ayer, hubo al menos tres robos en comercios.

En la panadería “Los Dos Molinos”

Un menor, de entre 13 y 15 años aproximadamente, ingresó anoche a la panadería “Los Dos Molinos”, situada en la esquina de las calles República Libanesa y General Paz, y tras intimidar a la empleada del comercio (aparentemente a mano armada), sustrajo la caja registradora con dinero en efectivo y se dio a la fuga sin dejar rastros.
Intervino en el hecho personal policial de la Comisaría Segunda de nuestra ciudad.

Fuerte golpe en una agencia de quiniela
 
En las primeras horas de la mañana de ayer delincuentes en moto irrumpieron en la agencia de apuestas situada en las calles Ángel María de Rosa y Winter (en el horario de apertura de los comercios) y tras intimidar a las empleadas del negocio con amenazas e improperios, se alzaron con dinero en efectivo, que estaba previsto para el pago de premios y apuestas.
Pero la pesadilla no terminó allí, ya que los malvivientes, no conformes con el botín, también sustrajeron las pertenencias de las dependientes, como carteras y teléfonos celulares.
Tras perpetrar el audaz robo, los cacos de dieron a la fuga con rumbo desconocido y se dio aviso a la Policía, que montó un operativo del tipo cerrojo para tratar de identificar y apresar a los malhechores, sin resultado positivo.

En una heladería Grido

La puerta abierta del comercio llamó la atención de los policías que patrullaban la zona, ayer, alrededor de las 3 de la madrugada, por lo que inmediatamente detuvieron la marcha. Al descender del móvil, enseguida constataron que el acceso a la heladería Grido situada en avenida República al 600 había sido violentado.
Una vez en el interior del negocio, los agentes del orden comprobaron que faltaba la caja registradora, que tenía una baja suma de dinero en efectivo, informaron fuentes policiales.