Fuentes policiales informaron que se cree los homicidios estuvieron motivados en una deuda de entre 60.000 y 100.000 pesos que el sospechoso apresado mantenía con el comerciante dueño de la vivienda en la que se cometió el hecho.
Todo comenzó este lunes en horas de la mañana, alrededor de las 11, en una casa situada en Belgrano al 700, entre Franco y Cerrito, de Bernal, partido de Quilmes, en la zona sur del conurbano, donde una de las víctimas, identificada por la policía como Guillermo Mouzo, residía junto a su esposa y su hijo discapacitado de 15 años.
Según las fuentes, Mouzo estaba casualmente acompañado de dos amigos cuando recibió la visita de un conocido.
En ese encuentro, el recién llegado mató a los tres amigos a balazos y luego huyó del lugar a bordo de un Volkswagen Gol color blanco, dijeron los informantes.
Al momento de los disparos, el hijo de Mouzo estaba en su habitación, mientras que la madre del chico había salido, confirmó a la prensa el fiscal de Instrucción de Quilmes a cargo de la causa, Leonardo Sarra.
El funcionario judicial explicó que la esposa de Mouzo llegaba a su casa cuando se cruzó con el homicida en plena huida.
Momentos después, Mouzo, quien era dueño de un lavadero de ropa, fue encontrado muerto en su habitación y sus dos amigos en el living de la casa, los tres con balazos en el cráneo.
Un jefe policial explicó a Télam que la esposa de Mouzo fue la que le indicó a la policía quien era el agresor, al que había alcanzado a ver con un arma de fuego en la mano.
El mismo vocero señaló que la mujer declaró ante los pesquisas que el asesino conocía a su esposo hacía años y que mantenía una deuda de dinero con él.
En ese sentido, el pesquisa consultado señaló que se cree que el homicida mató a los dos amigos de Mouzo cuando ambos salieron en defensa del dueño de casa.
En tanto, a partir de la identificación del sospechoso y del auto en el que se movilizaba, los policías comenzaron a buscarlo por distintas zonas.
Por la tarde, un efectivo de la comisaría 14ta. de la Policía Federal localizó el Gol blanco buscado en Piedras y San Juan, de esta Capital, donde el sospechoso habría chocado con un taxi, tras lo cuál fugó en contramano.
Ante esa situación se originó una persecución que terminó en Liberti y Ruy Díaz de Guzmán, donde el conductor colisionó contra otro auto y detuvo su marcha,
Allí, el sospechoso descendió del vehículo y disparó contra los policías que lo perseguían y repelieron la agresión.
Finalmente, el acusado fue detenido por los efectivos y en su poder se secuestró una pistola Glock .40, el mismo calibre del arma utilizada en el triple crimen.
Fuentes del Ministerio de Seguridad de la Nación identificaron al aprehendido como Juan Guillermo Moreno, sargento retirado de la Policía Federal.
Los mismos informantes añadieron que en medio del enfrentamiento armado entre el imputado y los policías, el encargado de un edificio que se encontraba en el lugar resultó herido de bala en el rostro, por lo que debió ser trasladado al Hospital Argerich.
Además, dentro del Gol de Moreno -en cuyo parabrisas se podían ver impactos de bala- se secuestraron bebidas alcohólicas y documentación de interés para la causa.
Por otro lado, los pesquisas bonaerenses procuraban en la tarde del lunes confirmar la identidad de los dos amigos de Mouzo asesinados.
COMENTARIOS