El doctor Fernando Topa, abogado patrocinante de la familia Zárate, particular damnificado por el homicidio de Bárbara Zárate, de 22 años, ocurrido en Junín el jueves 8 de septiembre último, afirmó que personas allegadas al imputado, Héctor Reyep (Peliculón), solicitaron a un testigo clave que cambie su declaración, por lo cual el hecho fue denunciado en la fiscalía.
“Nosotros consideramos, tanto la familia como yo, que fue un homicidio premeditado y tenemos suficientes elementos para demostrarlo en la causa. Paralelamente a esto, ayer denunciamos que una testigo clave en la causa fue visitada para que cambiase su declaración testimonial, declaración que es importante para nosotros”, manifestó el abogado.
“Si bien fue denunciado ante la Unidad Fiscal de Instrucción Nº 1, que está a cargo del doctor Roberto Rodríguez, nosotros no nos vamos a quedar con los brazos cruzados y por eso lo decimos públicamente, lo mismo haremos con cada uno de los hechos que consideremos que vayan por mal camino o traten de impedir que se haga Justicia”, afirmó, y agregó: “Lo denunciaremos tanto en la Justicia como públicamente, porque es un hecho que no podemos ignorar, que en una comunidad como la de Junín puedan llegar a pasar este tipo de cosas”, alertó.
En esta línea, el abogado aseguró que la persona que ‘visitó’ a la testigo clave estaba muy relacionada con el imputado.
“No valoramos otra cosa que no sea la verdad y estamos dispuestos a ir hasta las últimas consecuencias. Acá hay una familia que perdió a un ser querido, una madre que lloró y va a llorar siempre el crimen de su hija. Todos están destruidos”, afirmó.
Homicidio “premeditado”
“Consideramos y tenemos los elementos suficientes para demostrar que este fue un homicidio premeditado, no fue un accidente. No aceptaremos nada que no sea la verdad”, afirmó el doctor.
Preguntado si estaban identificadas las dos personas que –según trascendidos- habrían estado presentes en la vivienda de Moreno 340 la madrugada del crimen (además del imputado), el abogado afirmó: “El ministerio público fiscal está investigando y no quiero comentar nada al respecto. Hasta ahora el Ministerio está haciendo un excelentísimo trabajo y no podemos llegar a objetar absolutamente nada. En el caso hipotético de que tengamos que objetar algo, lo vamos a hacer firmemente”.
En cuanto a si habían existido amenazas a la familia de la víctima, dijo que no hubo amenazas de muerte pero sí actitudes sugestivas hacia otros testigos. “Queremos aportar otros testigos a los fines de demostrar lo que vinimos diciendo, que para nosotros es un homicidio completamente premeditado”, remarcó.
El “móvil”
“Hubo un motivo y yo voy mucho mas allá de lo que declaró la madre, en referencia a que la mataron porque ‘algo habrá visto’, yo considero que ella quiso salir de ese lugar y por eso terminó muerta. Todo lo que estoy diciendo lo puedo llegar a probar. Ella vivió muchas cosas, sabía muchas cosas, mucha información…”
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