Detuvieron a otro sospechoso por el crimen de las turistas en Salta

La Policía de Salta detuvo a un nuevo sospechoso en relación con el crimen de las dos turistas francesas asesinadas en la Quebrada de San Lorenzo, horas después de haber liberado por "falta de mérito" a un puestero que también había sido aprehendido.
El nuevo detenido es un baqueano de la zona que "habría tenido alguna participación vinculada al arma" con la que fueron asesinadas las jóvenes francesas Houria Moummi y Cassandre Bouvier, según informó ayer el juez de la causa, Martín Pérez.
El detenido, identificado como Daniel Octavio Eduardo Vilte, de unos 35 años, fue sometido ayer a declaración indagatoria por parte del magistrado, y luego se decidió que siga aprehendido.
"Yo sigo investigando todas las hipótesis que se están analizando", expresó el magistrado a la prensa, quien negó que por el momento haya extendido una orden de detención contra un nuevo sospechoso.
Pérez agregó que aún hay un período de tiempo del que no pueden determinar qué fue lo que sucedió con las chicas francesas, ya que desde que se inició la caminata y el tiempo en el que fueron encontrados los cuerpos "hay un lapso de 10 días".
"Al no tener datos de esos 10 días, bueno, se complica la investigación y es difícil reconstruir todo eso, que es a lo que nos estamos abocando", expresó el juez salteño.
Durante el fin de semana pasado habían sido demorados dos hombres y ayer por la madrugada se detuvo al puestero Francisco Tejada, de 43 años, quien recién fue liberado al anochecer, por "falta de mérito", luego de ser indagado como supuesto imputado.
El juez Pérez señaló que la declaración que realizó ayer Tejada hizo caer las pruebas en su contra, aunque sigue vinculado a la causa. Por otro lado, el juez reveló que fueron encontrados dos proyectiles, aparentemente utilizados para matar a Moummi, una de las víctimas.
También señaló que los indicios señalan que las jóvenes pudieron haber sido secuestradas en otro lugar y asesinadas en la zona en la que finalmente fueron hallados sus cuerpos.
Aparentemente, Moummi, la chica de origen argelino y 23 años de edad, vio cómo violaban y asesinaban de un tiro en la cabeza a su compañera, luchó con el o los atacantes, y logró escapar por algunos metros, aunque luego fue alcanzada y recibió un tiro en la espalda.