Una mujer de 77 años fue víctima de un terrible homicidio en su casa en la localidad bonaerense de Marcos Paz. Su cuerpo lo encontró su hija con una bolsa de nylon en la cabeza. El asesino dejó las llaves colgadas del alambrado de la vivienda al escapar, pista que facilitó la primera detención en la causa.
Todo apunta a que fue un robo, por el hecho detuvieron al jardinero que trabajaba en la casa de la víctima, aunque no descartan que haya más personas involucradas en el crimen.
La víctima se llamaba Mirta Norma Fernández, tenía 77 años según informó el medio crónica la torturaron hasta matarla. Se encontraba, boca arriba y con una bolsa cubriéndole la cabeza, en el interior del domicilio ubicado sobre la calle Ernesto Gómez, de donde además advirtieron que faltaban los ahorros de la mujer. Se trataría de una suma cercana a los 500 mil dólares.
Cuando los efectivos de la Delegación Departamental de Investigaciones (D.D.I.) de Luján llegaron al lugar tras el llamado de la hija de la mujer asesinada, el primer detalle que les llamó la atención fue encontrar el portón abierto, con el candado y las llaves colgadas en un alambrado. Para los investigadores, esto fue tomado como indicio de que Fernández conocía los agresores. El método que usaron para torturarla, recuerda la clásica técnica de tortura conocida como “El Submarino Seco”.
La investigación llevó a la primera detención en las últimas horas, estuvo a cargo de la Policía Comunal de Marcos Paz. Se trata de Eduardo Aarón, el jardinero de Fernández, quien al momento de ser arrestado tuvo varias contradicciones en su relato y creen que podría haber participado del homicidio o bien actuado como encubridor.
COMENTARIOS