A más de dos semanas de la desaparición de Rosa Fernández, la búsqueda no había arrojado hasta ayer pistas convincentes y por eso los investigadores del caso nunca descartaron ninguna hipótesis.
En la noche de ayer, efectivos policiales detenían a la expareja de Rosa Inés Fernández, que se encontraba desaparecida desde el domingo 26 de julio cuando salió de su casa con dirección a lo de una amiga a la que nunca llegó. Hoy fue hallada sin vida.
Se trata del hombre que la había trasladado en su vehículo a la zona de calles Magaldi y Quintana, donde, según se pudo comprobar por las cámaras de seguridad municipales, había descendido del rodado para dirigirse a la vivienda de su amiga a la que nunca llegó.
Según informaron, habría pruebas que comprometen a esta persona por la desaparición de la joven de 29 años, quien se encuentra imputado por “femicidio” y detenido en la sede de la DDI de Junín, con intervención del fiscal, Dr. Esteban Pedernera.
Investigación
“Hay una batería de pruebas en curso que se fueron analizando, como los teléfonos”, dijo el fiscal de la causa, Dr. Esteban Pedernera, en una entrevista con Democracia la semana pasada.
En el avance de la investigación habían sido incautados cinco teléfonos celulares para proceder al entrecruzamiento de datos y llamadas, y armar una geolocalización de los dispositivos móviles para conocer las ubicaciones y movimientos.
También arribaron a Junín el director de Criminalística, comisario mayor Cristian Méndez, con el equipo de Casos y Luces Forenses, con el fin de detectar manchas de sangre en elementos secuestrados.
Cabe recordar que el domingo 2 declararon cuatro personas ante el fiscal del caso, y también se secuestró el auto que fue peritado. Fuentes informales informaron a este diario que el resultado de las muestras de sangre halladas en el vehículo incautado dieron negativo –corresponderían a un hombre-, aunque se esperaba una contraprueba para descartar ese elemento.
Búsqueda
Desde el viernes 31 de julio, las fuerzas policiales venían realizando una intensa búsqueda, prácticamente puerta a puerta en ciertos barrios de la Ciudad, a partir de datos recabados en el marco investigativo del lugar donde fue vista por última vez. También en pueblos y en la zona rural.
Fuentes policiales informaron que, tambíen, se realizó una la búsqueda a pie y examinando montes y taperas.
Se buscó en el cuadrante norte de la ciudad, por el Aeródromo de Ruta 188. Asimismo, se continuó con la investigación, tomando declaraciones testimoniales necesarias, como así también el trabajo correspondiente sobre pruebas colectadas de peritajes.
“Se ha desplegado intensamente la búsqueda en la jurisdicción de la Comisaría Segunda que es la zona donde fue avistada por última vez. Se hizo un barrido tanto en tierra, como en agua y durante el fin de semana se extendió a las localidades vecinas como Agustín Roca, y Agustina”, había indicado el fiscal.
El personal del cuartel de Bomberos Junín, en conjunto con la Dirección de Riesgos Especiales, División Salvamento y Rescate de la Superintendencia de Seguridad Siniestral, llevó adelante tareas de rastrillaje en la zona de las lagunas y canales. Además, se habían sumado perros de la Policía bonaerense para los rastrillajes.
Otros elementos
Este martes, la investigación por la desaparición la joven de 29 años había sumado nuevos elementos probatorios. En efecto, fuentes con acceso al expediente judicial revelaron a Democracia que utilizaba cuatro teléfonos celulares y tenía dos perfiles de Facebook.
Estos datos eran desconocidos por los investigadores, por lo que se habían abierto nuevas posibilidades para los pesquisantes, que aguardaban los resultados de peritajes de los dispositivos móviles y de las redes sociales.
Marcha
Cabe destacar que en el mediodía de ayer, decenas de personas marcharon desde la Fiscalía hacia el centro de Junín pidiendo por la aparición de la mujer que fue vista por última vez el domingo 26, a las 18.30, cuando dejó su casa en Chile al 600.
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