Avanzan las pesquisas por el audaz robo concretado en una vivienda de gitanos

Habrían sido seis los delincuentes que robaron en rápida maniobra delictiva en una vivienda de gitanos, sita en calle Adolfo Alsina y colectora de la Ruta Nacional Nº 7.
Allí estaban, anteanoche, el dueño de casa -Pablo Miguel- (familiar del asesinado patriarca de los gitanos de Junín, Coria Miguel, ultimado a principios de 2007) y en un momento dado, llegaron al lugar dos vehículos.
Uno de ellos sería un Chrysler de alta gama y el otro una camioneta Toyota "Hi-lux", en la cual se movilizaba el sexto de malhechores.
Inicialmente, dijeron que venían por una transacción comercial (compra de un auto), pero ni bien les franquearon la puerta principal de acceso a la finca de los zíngaros, los marginales -cuatro de ellos-, blandieron armas de grueso calibre y cubrieron sus rostros con capuchas, intimidando a gitanas y gitanos, chicos y grandes, que estaban en la residencia.
Dos de los delincuentes, algunos de los cuales lucían chalecos antibalas yprendas de policía, se quedaron fuera de la casa y uno de los habitantes del lugar alcanzó a presionar la alarma (conectada a la central de una empresa del rubro de nuestro medio), pero cuando el empleado de la misma llegó al lugar, en vez de llamar a la Policía intentó ingresar a la casa y también quedó a merced de los ladrones, quienes lo agregaron al grupo de personas que tenían como rehenes.
Rápidamente, los al margen de la ley comenzaron a revolver armarios, cajones, etc., "dando vuelta", literalmente, la casa e -inclusive-, al notar que una gitana estaba muy nerviosa, le facilitaron una pastilla para que se calme y llegaron a aplicarle un "culatazo" en la cabeza a Pablo Miguel, provocándole lesiones leves.
Los malhechores actuaron con gran profesionalismo y tras apoderarse de unos 40.000 dólares, diversas joyas y algunos pesos en efectivo, escaparon con rumbo desconocido.
Enseguida, los integrantes de la familia zíngara llamaron a personal policial y efectivos de la Comisaría Junín Primera, de la Policía Distrital y de la Dirección Departamental de Investigaciones (D.D.I.) concurrieron a la casa asaltada y se montó un operativo tipo "cerrojo", que no dio resultados positivos.

Elementos secuestrados

El avance de las pesquisas está referido a que en el lugar del atraco se pudieron "levantar" un par de claras huellas de los pillos, como asimismo se recuperó fuera del inmueble un cargador con balas punta azul de una pistola 9 milímetros.
También se halló una bolsa con fierros, barretas y otros elementos, que son sometidos a pericias por parte de personal de la Policía Científica Departamental, que sigue instrucciones del fiscal de turno, Dr. Carlos Colimedaglia, quien caratuló el hecho como "robo calificado".