Comerciantes de la zona alrededor del cruce de las avenidas República y San Martín, en el barrio Emilio Mitre, están indignados por la ola de robos que se vienen cometiendo en la zona. La gota que rebalsó el vaso de los dueños de los negocios fue un audaz atraco cometido ayer.
La propietaria del local “Moda Stop”, en San Martín al 1100, denunció que cuando llegó al local de ropa en la mañana de la víspera se encontró con que le habían sustraído prácticamente toda la mercadería.
Con indignación y lágrimas en los ojos explicó a DEMOCRACIA que ya no podrá seguir con su emprendimiento: deberá cerrar. Un comercio que abrió sus puertas hace apenas un mes y ahora bajará la persiana definitivamente.
Según la comerciante, los desconocidos que le sustrajeron las pertenencias abrieron el candado de una persiana metálica, rompieron un vidrio y se llevaron cuanto encontraron a su paso.
Más víctimas
Ella no es la única víctima. Silvana, propietaria del local “La rotonda” -que se dedica a la venta de artículos de limpieza- dijo que la situación es cada vez peor.
“Soy la propietaria del comercio que está al lado del que atacaron hoy (por ayer). Abrí y a los 15 días me rompieron la puerta de vidrio y me robaron”, relató.
Por su parte, la propietaria de Vacaró Calzados, Haydée Da Pieve, cuyo comercio se encuentra a escasos 100 metros de la ya peligrosa esquina, sumó su poco grata experiencia.
“Ya me robaron 10 veces. Nunca recuperé nada, ni la caja registradora. En tres oportunidades encontraron a los autores, pero eran menores…y todos saben lo que pasa cuando es así”, se quejó. “En la Comisaría estoy más tiempo yo que los delincuentes”, sentenció.
A pocos metros de ese lugar está el autoservicio “Creciendo”. Una empleada del lugar relató cómo desconocidos armados sorprendieron a clientes y personal en el interior del comercio hace unos días. “Nunca hay respuestas”, lanzó.
Lo llamativo para los comerciantes es que basta con que un negocio abra sus puertas para que, en poco tiempo, empiecen a “visitarlos” delincuentes.
Así sucedió con la agencia de lotería que se encuentra sobre avenida San Martín, o la tienda de cotillón “El duende soñador”, que sufrió la sustracción de mercadería hace poco tiempo.
Más Policía
Los comerciantes del lugar hicieron especial hincapié en la necesidad que haya mayor presencia policial. “Uno va al centro y hay policías por todos lados, pero acá no pasa nada”, protestó un comerciante.
Llega a tanto la inseguridad en el sector que algunos admitieron que cierran más temprano por miedo a “que pase algo”.
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