Un niño de tres años, que caminaba de la mano de su padre rumbo a una pizzería, fue asesinado de un balazo en la espalda por dos delincuentes que los sorprendieron y dispararon al pequeño tras robarles dinero, en el partido bonaerense de Lomas de Zamora. Hubo protestas y ayer allegados de las víctimas incendiaron la casa de uno de los acusados.
Por el hecho, horas después, la Policía detuvo a un adolescente de 16 años cuando caminaba a unas tres cuadras del lugar del crimen, y ayer por la tarde fue identificado por el padre de la víctima en rueda de reconocimiento.
“Papá, me duele”, fueron las últimas palabras que le dijo Agustín a su padre, Martín Bustamante, antes de desvanecerse tras recibir el balazo, que habría sido efectuado por el joven detenido o por su cómplice, que esta tarde permanecía prófugo.
Fuentes policiales y judiciales informaron hoy que el hecho se registró cerca de las 21 de anoche en la calle Mayor Olivero al 1.300 de Villa Centenario, Lomas de Zamora, y que el niño falleció mientras era atendido en la Clínica Boedo, hasta donde fue trasladado por su propio padre.
IBA DE LA MANO DE SU PAPÁ Y LES ROBARON
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