A un año del homicidio de Claudio Mutti

Ayer se cumplió un año del homicidio del joven Claudio Javier Mutti, de 32 años de edad, quien desde hacía alrededor de un año trabajaba en la Municipalidad de Junín, desempeñándose en la oficina de Archivo comunal.
El 12 de mayo de 2008, el cuerpo de Mutti fue encontrado a metros del cementerio Central, a un costado de las vías, entre los pasos a nivel de las calles Juan Bautista Alberdi y Almirante Brown (más cerca de este último), entre unos pastizales y -luego de la autopsia-, se determinó que había sufrido violencia física.
Horas antes de hallarse el cadáver, la madre de Mutti (Graciela Margarita Botaso), había radicado la denuncia sobre la desaparición de su hijo en la Comisaría Junín Segunda, ya que Claudio no había vuelto a dormir a su casa, ubicada en Coronel Dorrego 1157, casi Avenida Libertad, ni tampoco había ido el día anterior a trabajar al Municipio.
En la tarde del 12/5/08, chicos que jugaban a un costado de las vías del ex Ferrocarril "General San Martín" vieron el cadáver y de inmediato se dio aviso a personal de la Policía Distrital y de la Dirección Departamental de Investigaciones (D.D.I.), haciéndose presente en el lugar el fiscal de turno, Dr. Carlos Colimedaglia, quien ordenó una serie de directivas a los uniformados.
Las primeras pericias habrían determinado que Claudio Mutti (ex monaguillo de la Parroquia "Sagrado Corazón de Jesús" y con algunos problemas de salud) murió por "paro cardiorres-piratorio traumático por asfixia mecánica".
Un par de días después, el apellidado Agustina fue aprehendido por personal de la Comisaría Junín Segunda, siendo con el paso de los días imputado por la muerte de Claudio Javier Mutti.
Quedó a disposición entonces del Juzgado de Garantías de turno del Departamento Judicial Junín y va a ser juzgado oralmente por el hecho violento detallado.
Al parecer, Mutti salió de su casa a media tarde del 11 de mayo, a bordo de su bicicleta, aparentemente hasta la sede del Club Social Villa Talleres, que solía frecuentar los fines de semana.
Allí se pierde su rastro, ya que no se ha podido aún determinar qué hizo el empleado municipal en las horas posteriores, estimándose que murió entre las 2 y las 5 de la madrugada del lunes 12, según consta en el certificado de defunción oficial.
En principio, trascendió que la muerte no había sido motivada por un hecho violento, pero en la medida que el personal de Científica, de la Comisaría Segunda y la D.D.I. comenzaron a avanzar en las pesquisas, se habrían recolectado importantes pruebas en el lugar donde fue hallado sin vida Mutti.
Una de ellas, serían huellas dactilares de una persona, claramente marcadas en los anteojos que Mutti usaba y, el joven fallecido habría sido ultrajado.