Un arte

Corbo cree que años atrás “era muy natural” tener este oficio, y con el tiempo esto se fue haciendo más infrecuente. Por eso analiza que “hoy en día posiblemente sea un arte porque no hay gente que lo haga”. Según dice, para desarrollar esta actividad “hay que ser muy observador y tener facilidad para las manualidades”. Así y todo, lamenta que a veces se vea a la reparación de calzados como un oficio menor “En algún momento el zapatero ha sido un poco despreciado”, sostiene.

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