El PRO, partido que lidera el jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri, puso el pie en el acelerador y presentó su plataforma electoral agroindustrial para el período 2015-2019 destinada al campo en una reunión con los referentes de la Mesa de Enlace.
Con trece puntos, la propuesta sorprendió porque propone la eliminación de las retenciones a la soja que hoy tributa 35 por ciento, a razón de una reducción del 5 por ciento durante siete años hasta que sean historia.
La propuesta se gestó en la Fundación Pensar que es la usina de ideas del PRO donde trabajan, como reconocen sus integrantes, en proyectos para gobernar la Argentina.
Lo interesante de la Fundación es que la integran íconos del agro como Luciano Miguens, mítico ex presidente de la Sociedad Rural Argentina y que fue una de las cuatro caras visibles de la Mesa de Enlace combativa a partir del 2008 cuando se desató el conflicto que llevó a los productores a las rutas.
También están el ahora senador Alfredo de Ángeli y Jorge Srodek, ex vicepresidente de CARBAP, entre otros asesores, por eso no extraña que la propuesta para el campo calce sin calzador, valga la redundancia.
La misma propone la eliminación de todas las retenciones al agro, cereales, granos, oleaginosas, carnes y economías regionales así como también la desaparición de las trabas al crítico problema de la comercialización agropecuaria.
Pero la propuesta también tiene algunas perlitas como la recuperación del RENATRE (Registro Nacional de Trabajadores Rurales y Empleadores Rurales), “que fue un órgano tripartito, con participación de todos los sectores, que tuvo éxito en lograr la formalización de los trabajadores del sector”.
Ese ente que conducía Gerónimo “Momo” Venegas pasó al Gobierno nacional donde se convirtió en el Registro Nacional de Trabajadores y Empleadores Agrarios (RENATEA), autárquico en jurisdicción del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad.
“Nos comprometemos a reformar la Ley de Ministerios para crear, en línea con el modelo de país y la visión de la agroindustria que planteamos, un Ministerio de Agroindustria fortalecido que, sin dejar de atender a la producción primaria, tenga una visión industrial, alimentaria y de conjunto del sector y su potencial”, finaliza la medulosa propuesta.
De este modo, con una iniciativa integral, el PRO le ganó la delantera a otros espacios políticos que todavía no hicieron los deberes con el agro.
Otra noticia que movilizó la semana fue la conclusión a la que llegó Jorge Solmi, ex legislador bonaerense, director de la Federación Agraria Argentina en la que explicó que al cumplirse casi un año del anuncio de la devolución de las retenciones de Trigo, el Gobierno Nacional devolverá sólo 22 millones de dólares, de los 600 millones anunciados.
“La realidad es muy lejana a ese relato, ya que en estos días el Ministerio de Agricultura de la Nación anunció que el reintegro será aproximadamente casi 30 veces menos”, dijo Solmi, quien recordó que se cumplieron 11 meses del momento en que la presidenta Cristina Fernández prometía “que se reintegrarían unos 600 millones de dólares”.
Según ese anuncio, 10.200 productores recibirán 2.100 dólares cada uno, una suma que le alcanzaría para resembrar poco más de 4,5 hectáreas, por lo que con toda la devolución se podrá sembrar 80 veces menos que la realizada la campaña 2013-2014.
En mayo del año pasado el Gobierno Nacional oficializó la creación de un fideicomiso para reintegrar los derechos de exportación del trigo.
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