Manes y el PRO se cruzan en una nueva disputa que sacude los cimientos de JxC
ANÁLISIS

Manes y el PRO se cruzan en una nueva disputa que sacude los cimientos de JxC

La nueva embestida de Facundo Manes contra Mauricio Macri provocó una catarata de réplicas de dirigentes del PRO que cuestionaron que el neurólogo utilice frases “altisonantes” para diferenciarse en la construcción de su propia precandidatura presidencial.

. La controversia, registrada a pocas semanas del duro cruce que el otro precandidato radical, Gerardo Morales, le había asestado al ex presidente por “entrometerse” en cuestiones de la UCR de Chubut, pone de manifiesto una rivalidad que conmueve los cimientos de Juntos por el Cambio (JxC) a pocos meses del inicio del cronograma electoral. Es que las diferencias entre el PRO y el radicalismo no sólo tienen que ver con la “química” que puedan tener sus principales referentes: hay una mirada diferente sobre el rol del estado, por caso, pero también sobre el rumbo de las políticas laborales o de asistencia social. Sólo el valor de la unidad de JxC, con la que en las últimas dos elecciones obtuvo un 41% de los votos, es lo que evita que la coalición opositora sufra un desgajamiento que minimice sus chances en la batalla electoral de 2023.

“MAYOR RESPETO”

La semana pasada había sido Elisa Carrió la que le había pedido a Macri “un mayor respeto” hacia el centenario partido. Es que el ex mandatario suele realizar críticas mordaces a los dirigentes del radicalismo por “resistirse al cambio” que, reitera, necesita el país para encaminarse hacia un largo período de desarrollo.

En el marco de esa tensión indisimulable, Manes aprovechó en las últimas horas un reportaje televisivo para emprenderla contra Macri, subrayando errores de su gobierno, y luego trazó una provocativa comparación: “El populismo económico es el kirchnerismo, pero el populismo institucional también lleva al fracaso de las naciones”.

OLA DE CRÍTICAS

Ese acercamiento que intentó establecer entre el macrismo y el cristinismo provocó una ola de críticas de dirigentes del PRO, como el diputado y precandidato a gobernador, Cristian Ritondo y sus pares Fernando Iglesias y Hernán Lombardi, por caso. El ex secretario del ex presidente y actual legislador porteño, Darío Nieto, fue más allá y le espetó “¿Manes a quién te comiste?”, para luego enumerar lo que, a su entender, fueron los logros del ex jefe de gobierno porteño a lo largo de su carrera política.

POSTURAS

En el radicalismo, en tanto, guardaron silencio. Si bien el gobernador Morales mantiene una relación tensa con el expresidente, hay otros dirigentes de la UCR que no descuidan el vínculo con el partido amarillo: el senador Martín Lousteau cultiva una alianza con Horacio Rodríguez Larreta en CABA y el jefe del interbloque de la cámara alta, Alfredo Cornejo, comparte actos con Patricia Bullrich. El ex gobernador mendocino, que también supo mostrarse con Manes en un encuentro en La Plata, es uno de los pocos dirigentes del radicalismo que destaca asiduamente la importancia de la unidad de la coalición opositora.

Por los chispazos internos no se volvió a juntar la Mesa Nacional de JxC, que tuvo su último encuentro presencial, con la ausencia de Macri, el 24 de agosto pasado. En teoría, siguen trabajando los técnicos de los think thank de la UCR (Fundación Alem), el PRO (Fundación Pensar) y la Coalición Cívica (Instituto Hannah Arendt) para consensuar un programa de gobierno que, en los papeles, debería materializarse en una plataforma electoral en 2023.

NINGUNEO

El peronismo republicano también aporta a ese debate de ideas. Pero ayer su máximo referente, el auditor general, Miguel Angel Pichetto, pareció ningunear al radicalismo en la definición de la candidatura presidencial del armado opositor. Es que, haciendo un paralelismo con lo que sucede por estas horas en las presidenciales de Brasil, reclamó que en la máxima contienda electoral del año próximo compitan Macri y Cristina como forma de decidir el rumbo que debería adoptar Argentina.

“No se puede hacer política con suplentes. En Brasil jugaron los titulares, los dos líderes Lula y Bolsonaro; es un buen ejemplo para lo que tiene que pasar en el país”, enfatizó.

Tanto Larreta como Bullrich seguramente se habrán atragantado con esas declaraciones. Ya lanzados a la carrera presidencial, no ocultan su malestar por la postura ambigua que viene manifestando Macri en sus últimas apariciones acerca de sí intentará o no un “segundo tiempo” en la Casa Rosada.

COMENTARIOS