Vacunas: ¿Y los discapacitados?
OPINIÓN

Vacunas: ¿Y los discapacitados?

Increíblemente, entre los dramas que ha instalado la pandemia que lleva más de un año se ha cometido un olvido con consecuencias irreparables para los que pueden sufrir del Covid.
Para los que sufren alguna discapacidad: ceguera, autismo, síndrome de Down, parálisis cerebral, imposibilidades motrices, etc. no se ha establecido en los protocolos creados y alterados en varias oportunidades un lugar que privilegie su situación en nuestro país.
Cualquiera que conoce personalmente las características de quienes sufren alguna de estas circunstancias sabe que el cariño y el afecto es intransferible en sus vidas. Es imposible imaginarlos en una habitación a solas con seres extraños y ni qué pensar en caso de tener que soportar un proceso de agravamiento con respirador artificial. Esa alteración produciría una situación que los llevaría a un camino irreversible.
Es sabido que en la historia de la Humanidad han habido ejemplos que nos asombran  a los que nos creemos normales: Beethoven o más recientemente Stephen Hawking, que deslumbró a nuestra generación. En nuestro país muchos de quienes poseen estas características han podido desarrollar estudios primarios, secundarios y terciarios.
Desde un principio la facultad de conducir el proceso de lucha que incluye la aplicación de las vacunas fue delegada en manos del presidente de la República y los asesores integrantes del Poder Ejecutivo o comisiones nombradas por él. Nadie se acordó de ellos o de sus familias. Preferiría pensar que superado por el problema de errores en la magnitud de la epidemia hizo que no se los tuviera en cuenta. Inimaginable sería que la sombra de Goebbels hubiera pasado por la mente de alguno.
El presidente daría un gran ejemplo, en vez de irritarse y contestar con agravios cuando se le señalan errores, y debería urgentemente dictar un decreto estableciendo una preferencia en el protocolo, puntual y específica, para los que tienen estas características y certificado oficial del Estado de su discapacidad, una norma que le abra la puerta a una vacunación inmediata.

(*) Exsenador de la Nación 
(UCR – CABA). 

COMENTARIOS