Antecedente con los autos

En marzo de 1999 el gobierno de Carlos Menem puso en marcha el plan canje de autos, que luego tuvo una segunda versión a mitad de ese mismo año y fue considerado un “éxito”. El plan le daba la posibilidad a la gente de cambiar sus autos viejos por modelos 0 KM u otro usado más nuevo y en mejores condiciones.
El plan habilitaba a enviar a desguace vehículos de más de 10 años de antigüedad y obtener a cambio certificados para comprar otro usado o un 0 km de producción nacional, obteniendo descuentos de hasta 3.000 pesos en la categoría automóviles, hasta 4.000 pesos en utilitarios y hasta 12.000 pesos en camiones u ómnibus.
Con este plan, todos los que tenían un vehículo usado (auto, utilitario o pesado) con más de 10 años de antigüedad, podían presentarse para canjear su unidad.
Con esa herramienta el Gobierno buscaba alcanzar tres objetivos: facilitar la sustitución de vehículos obsoletos por unidades nuevas de producción nacional, apuntando a reactivar la industria automotriz, en aquel entonces gravemente herida por la crisis de Brasil. Mejorar las condiciones de seguridad de los autos en circulación. Y disminuir la emisión de gases contaminantes.
El balance fue positivo y por eso hubo una segunda parte de este plan que permitió entre fines de los ´90 y principios del 2000, renovar el parque automotor a nivel país.