Paro del jueves: Duro cruce entre Capitanich y sindicalistas opositores

El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, acusó ayer a los sindicatos no alineados con la Casa Rosada de ser "funcionales a los fondos buitres", lo que desencadenó un fuerte cruce con los dirigentes gremiales Luis Barrionuevo y Omar Maturano, quienes le respondieron con insultos.
"Los sindicatos opositores al Gobierno, los medios de la oposición y los partidos políticos opositores son funcionales a los fondos buitres porque, frente a la defensa de los intereses soberanos de la Argentina, se ponen del lado de los intereses de los fondos buitres", aseguró el ministro coordinador durante su conferencia de prensa diaria en la Casa de Gobierno. En ese sentido, el funcionario nacional aclaró a quiénes apuntaba: "No cabe la menor duda que la CGT, la Unión Cívica Radical o el Frente Renovador actúan en consonancia con la estrategia de los fondos buitres. No sé si les pagan o no, algunos puede que lo hagan gratis porque tienen una clara vocación extranjerizante".
Además, advirtió que sectores del sindicalismo, la prensa y partidos políticos "se olvidan de la Constitución Nacional cuando hay que luchar contra intereses poderosos del extranjero".
Las declaraciones no cayeron bien en los gremios opositores, que rápidamente salieron al cruce del jefe de Gabinete.
El primero fue el líder de la CGT Azul y Blanca y secretario general del gremio gastronómico, quien calificó a Capitanich como "un pelotudo caro" y "un recontra alcahuete" de la presidenta Cristina Kirchner.
"¿Saben de dónde salen los buitres? De Santa Cruz", denunció Barrionuevo en declaraciones radiales y cuestionó al gobierno nacional por el nivel inflacionario y el deterioro del poder adquisitivo del salario.
Más tarde, el secretario general de La Fraternidad aseguró que no responderán a las acusaciones del jefe de ministros, ya que consideró que "contestar eso es el juego que propone" el funcionario nacional. Maturano advirtió que en el país "se viene una devaluación peor que ésta" y explicó que los sindicatos no están "en contra del Gobierno", sino "en contra del plan económico" del Poder Ejecutivo. <