En medio de otra jornada tensa en el gremio automotor, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, advirtió que algunas terminales automotrices "presionan al Gobierno para tener medidas excepcionales" y les pidió cooperación para "no poner en vilo" las fuentes de trabajo.
"Es necesario tener una clara posición", afirmó, al sostener que las automotrices "no pueden todo el tiempo promover una presión sistemática" y "poner en vilo la estabilidad de trabajadores y pretender un mecanismo de presión al gobierno".
En sus habituales declaraciones a la prensa, el funcionario nacional dijo que la industria automotriz es "importante", pero le reclamó que se integre con las autopartistas.
Además, reclamó, sin mencionarlas, a las "once automotrices de origen multinacional" que "deben cooperar para que haya progreso, no solo económico en sus empresas, sino en los trabajadores, y equidad en la distribución del ingreso".
El jefe de Ministros sostuvo que la situación de la industria automotriz "no es homogénea" en todas las plantas, y pidió "cooperar para que haya progreso, no solo en lo económico" sino también para los trabajadores.
"No es homogénea la situación de todas las plantas" automotrices, afirmó ayer el exgobernador del Chaco, al explicar que "existen plantas que no han aumentado precios y han tenido incremento de demanda".
PIDIÓ NO PONER EN VILO LAS FUENTES DE TRABAJO
COMENTARIOS