Se complica la situación judicial del motorman del accidente en Once

El juez federal Ariel Lijo le amplió la declaración indagatoria al maquinista detenido Julio Benítez a raíz de nuevas evidencias surgidas en la causa por el choque del tren de Once el sábado último, entre ellas el estudio de ADN que demostró que es suya la sangre hallada en el disco rígido de la cámara de la cabina, que apareció en su mochila.
Además, por la mañana, el magistrado recibió el informe médico y psicológico de peritos del Cuerpo Médico Forense, que dio un resultado "desfavorable" y que no avala "de ninguna forma" la versión dada por el motorman sobre lo que le ocurrió la mañana del choque.
Lijo recibió a primera hora el informe de ADN que dio como resultado que manchas de sangre halladas en el disco rígido y en la gaveta donde estaba guardado en la cabina del motorman pertenecen a Benítez.
"Esto evidencia que arrancó el disco después del accidente", explicaron los investigadores, que agregaron que se lo llevó en su mochila cuando fue rescatado del lugar y trasladado a un centro asistencial.
Lijo le notificó además a Benítez que será acusado por "lesiones gravísimas" ya que uno de los 99 heridos sufrió la extirpación del bazo a raíz del choque en el andén de Once.
El juez lo acusará del delito de "estrago, lesiones y sustración y ocultación de prueba" y podría dictar su procesamiento a principios de la semana próxima.
Benítez fue sometido a pericias psicológicas y médicas por parte de peritos judiciales, que dieron como resultado que tiene "rasgos psicopáticos" y "tendencia a la simulación".