Once: Jaime, Schiavi y Cirigliano entre los imputados que van a juicio oral

La causa por la tragedia ferroviaria de Once fue elevada ayer a juicio oral por el juez Claudio Bonadío, a tres días de cumplirse el primer aniversario del accidente que causó la muerte de 51 personas y heridas a más de 700.
La medida, que es inapelable, alcanza a 28 imputados, entre los que se incluyen funcionarios y ex funcionarios, empresarios y el maquinista Marcos Córdoba.
El juicio oral estará a cargo del Tribunal Oral Federal 1 de la Capital, designado a través de sorteo, en el marco de la investigación por el hecho ocurrido el 22 de febrero de 2012 cuando un tren de la línea Sarmiento colisionó con la cabecera del andén 2 de la estación terminal Once.
Entre los imputados que deberán ir a juicio oral se encuentran los hermanos Cirigliano, quienes estaban a cargo de la concesión de TBA; y los exsecretarios de Transporte del kirchnerismo Ricardo Jaime y Juan Pablo Schiavi.
Además, la lista incluye al maquinista Córdoba, quien conducía la formación siniestrada, y al exsubsecretario de Transporte Ferroviario Antonio Luna.
En el escrito de elevación a juicio oral se remarcó que "una vez concluida la pericia contable" en la etapa de instrucción, se "da cuenta cómo se aplicaron gran parte de los recursos que ingresaban a TBA, proveniente tanto de las tarifas como de la percepción de los subsidios que le transfiriera el Estado nacional para garantizar el normal y seguro funcionamiento de las líneas Mitre y Sarmiento".
"Debe señalarse que el Juzgado ha hecho, además, una importante recopilación y análisis de documentación contable secuestrada en el marco del legajo de pericia contable", añadió el documento.
Al respecto, recalcó: "Estos elementos de prueba han permitido constatar la existencia de diversas maniobras relacionadas con el manejo de fondos recibidos del Estado nacional y que ameritan que se vuelva a escuchar a determinados imputados, ampliando su declaración indagatoria, poniéndolos en conocimiento de dichas conclusiones y permitiendo que manifiesten en su defensa".
La investigación estableció que la formación conducida por Córdoba "salió de la estación Caballito a las 8:23:20 hs. y llegó a una velocidad de 27 kilómetros por hora a los trescientos metros del paragolpe".
Esta "velocidad que siguió teniendo hasta pocos metros antes del impacto que según el Global Positioning System (GPS) descendió a 20 kilómetros por hora y a esa velocidad se estrelló contra el parachoque de la estación, el que no poseía su sistema hidráulico en funcionamiento", afirmó la investigación.