Paro con fuerza en Buenos Aires y dispar adhesión en el interior

El primer paro nacional contra el kirchnerismo se sintió ayer con intensidad en la Capital Federal y en el primer cinturón del Conurbano bonaerense, aunque en el interior la medida tuvo escasa o dispar adhesión.
En todo el país hubo movilizaciones y cortes de rutas en más de 160 puntos, según las centrales sindicales que lo convocaron, aunque el Gobierno minimizó la protesta y la calificó de "piquetazo" que simboliza "prepotencia y autoritarismo".
El cese de actividades dispuesto por 24 horas, inédito desde que el kirchnerismo llegó a la Casa Rosada en 2003, incluyó la paralización de casi todas las líneas de trenes que recorren el área metropolitana, la cancelación de vuelos de cabotaje y regionales, piquetes en los accesos a la Capital Federal –cuyas calles tuvieron un caudal de tránsito mucho menor al habitual– y el cierre de comercios, entre otras consecuencias.
Fue convocado por las centrales obreras opositoras que lideran Hugo Moyano (CGT) y Pablo Micheli (CTA), quien pasado el mediodía la consideró "un éxito", y tuvo la adhesión del campo y el sector de Luis Barrionuevo, en reclamo por la inflación, para que se actualice el mínimo no imponible del Impuesto a las Ganancias y se amplíen las asignaciones familiares, entre otras consignas.
Micheli dijo que la medida fue "un éxito en todo el país", con "una contundencia impresionante", y le contestó al ministro coordinador: "Que salga de la Casa Rosada y recorra las calles y va a encontrar que están desiertas como si fuera un domingo".
Sin camiones ni bancos, y con la mayoría de las estaciones de servicio cerradas, la ciudad de Buenos Aires presentó el movimiento típico de un feriado, con numerosos negocios cerrados, colectivos con menor cantidad de pasajeros y un tránsito reducido. La menor presencia de personas estuvo motivada también por la decena de piquetes en los accesos a la Capital Federal.
La gran cantidad de gremios en el interior y las divisiones internas de cada agrupación respecto de sus centrales nacionales también generó disparidad en la adhesión de docentes y sectores del transporte en los distintos distritos.