El radicalismo impulsó ayer la creación de una "multisectorial" no electoral, con la participación de fuerzas políticas, sociales, intelectuales y sindicatos para encarar acciones "contra la reforma constitucional y para frenar el avance institucional" del gobierno de Cristina Fernández.
La iniciativa fue dada a conocer durante un encuentro partidario que logró reunir a la mayoría de sectores internos del radicalismo y que fue planteado como una demostración de fuerza ante la presencia de intendentes, legisladores nacionales y dirigentes de todo el país.
El diputado y ex candidato a presidente Ricardo Alfonsín convocó a "un trabajo en conjunto para frenar el deterioro institucional", pero se ocupó de aclarar que "no tiene nada que ver con un frente electoral, porque se podría debilitar la fuerza convocante".
Según la lectura del hijo del ex presidente Raúl Alfonsín, un armado de este tipo no podría tomarse como una base para un proyecto electoral porque, a su criterio, "por lo menos tiene que haber tres alternativas a nivel nacional", con la mira puesta en el 2015.
Esta estructura tripartita que propuso Alfonsín, lleva implícita la postura radical de reiterar los acercamientos con el arco progresista que integran el FAP y la Coalición Cívica, enfrentados tanto al kirchnerismo como a una tercer alternativa que podría encarar el PRO junto a los peronistas disidentes.
El senador Ernesto Sanz también coincidió con esta postura.
CON LA PARTICIPACIÓN DE OTRAS FUERZAS DEL ARCO OPOSITOR
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