Menos rindes por la sequía y más carga tributaria para el campo, es la conclusión de un informe de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de la Argentina (FADA), que se conoció ayer. Según el estudio privado, en 2022, de cada 100 pesos obtenidos por el sector agrícola, más de 67 quedaron en manos del Estado.
Así calculó el informe la participación impositiva sobre los ingresos del campo, que aumentó cinco puntos respecto de la medición de octubre, a pesar de que las condiciones climáticas pongan en jaque los rindes del sector.
El índice FADA se calcula trimestralmente y mide cuánto de la renta agrícola queda en manos estatales. Con respecto al último trimestre de 2022, el número creció 5,9 puntos porcentuales y arrojó una participación del 67,2 por ciento para el promedio ponderado por cultivos. Esto significa que por cada 100 pesos de renta que genera una hectárea, 67,2 pesos se van en impuestos.
Según explica el informe, que baje la producción por la sequía también hace que se alteren los saldos del IVA de los productores. El saldo técnico es “el resultado de la resta del IVA pagado en compras y el IVA percibido por sus ventas”, indicaron. Y explicaron que, si se acumulan saldos técnicos por una situación excepcional -como la sequía que hace caer las ventas- “el productor no puede usar ese saldo para pagar otros impuestos ni lo puede recuperar fácilmente, por lo que directamente se convierte en mayor carga fiscal”.
El encargado de explicar esta dinámica es David Miazzo, economista jefe de FADA, quien evaluó que “uno esperaría que si la producción baja, sea por sequía o por el motivo que sea, la presión de los impuestos también baje. Sin embargo, por la estructura tributaria que pesa sobre la producción agrícola, un evento adverso como la sequía en lugar de reducir el peso de los impuestos, lo aumenta”, dijo.
INDICES PROVINCIALES
Según FADA, la participación de los impuestos nacionales en la rentabilidad del campo es del 67,2 por ciento. Pero también calcularon el índice a nivel provincial. En Córdoba es del 68,3 por ciento, mientras que en la provincia de Buenos Aires es del 64,8 por ciento; en Santa Fe es del 63,1 por ciento; en La Pampa, el 69,1 por ciento en entre Ríos el 69,2 por ciento y en San Luis, el 68.
En índice del 67,2 por ciento de la participación del Estado está compuesto por impuestos nacionales, provinciales y municipales. Su composición central son los derechos de exportación, a los que se le suma el impuesto a los créditos y débitos bancarios.
En tanto, los impuestos nacionales coparticipables entre el Estado nacional y los Estados provinciales representan el 23,8 por ciento de los impuestos medidos por FADA. Los principales de este grupo son el impuesto a las Ganancias y los saldos técnicos de IVA.
Las provincias reciben una parte del porcentaje mencionado como coparticipación y recaudan de manera directa otro 5 por ciento de los impuestos que pagan los productores.
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