Rodríguez Larreta se dejó ver en Mar del Plata con el senador radical Martín Lousteau y con el titular del radicalismo, Gerardo Morales, y Diego Santilli.
Rodríguez Larreta se dejó ver en Mar del Plata con el senador radical Martín Lousteau y con el titular del radicalismo, Gerardo Morales, y Diego Santilli.
PANORAMA POLÍTICO NACIONAL

Fuerte e inusitado clima de confrontación contra la Justicia inaugura el año electoral

Pese a la falta de apoyos internos en su pedido de juicio político contra la Corte, el Gobierno avanza en una disputa que abroquela a Juntos por el Cambio en “defensa de la Constitución”, mientras crece el temor a la aparición de “más carpetazos”.

La embestida del oficialismo contra la Justicia se aceleró tras la condena a Cristina Kirchner del pasado 6 de diciembre y por ello en la oposición aseguran que sería parte de un plan de ataque deliberado a dirigentes opositores, como la filtración de chats del ministro porteño Marcelo D’Alessandro, cuyo primer capítulo se conoció unas horas antes de la lectura del fallo de la denominada Causa Vialidad. 

Pero el presidente Alberto Fernández no encontró el apoyo unívoco del peronismo en su intento de remoción de la Corte Suprema: la mayoría de los gobernadores, por caso, consideran riesgoso para “la seguridad jurídica” esta avanzada contra el máximo tribunal.

Es que muchos mandatarios buscan confirmar inversiones en sus provincias y tampoco quieren enemistarse con un alto Tribunal que, como en el caso del sanjuanino Sergio Uñac, sería la última instancia judicial que definiría una eventual impugnación a su candidatura a la reelección.

La foto con intendentes

Luego que Gustavo Bordet (Entre Ríos) y Mariano Arcioni (Chubut) rechazaran haber suscripto el documento que anunciaba el juicio político contra la Corte, en un nuevo gaffe del equipo de Presidencia, quedaron sólo 10 caciques provinciales acompañando a A. Fernández en tamaña empresa.

Esa falta de volumen político forzó la foto del Presidente en Mar del Plata en la que se rodeó de intendentes bonaerenses que le manifestaron su apoyo a una iniciativa que, se sabe, está destinada al fracaso por la falta de respaldo en Diputados.

Pero esa movida le sirve al Presidente para buscar una gestualidad afín a la de Cristina Kirchner y por el momento evitar ser víctima, a falta de casi un año para terminar mandato, del operativo desgaste que el kirchnerismo supo realizar contra el ex ministro Martín Guzmán, por caso.

Axel Kicillof, el santiagueño Gerardo Zamora o el chaqueño Jorge Capitanich, que funcionan como una terminal de la Vicepresidenta en la Liga de Gobernadores del PJ, resultaron aliados convenientes. Mientras que el bonaerense aspira a reelegir y a no ser forzado por su “jefa política” a proyectarse a la contienda nacional, los dos últimos sí buscan un guiño de la ex mandataria para poder competir por la primera magistratura.

El ataque al máximo tribunal le garantiza al jefe de Estado además cierta cohesión política, a caballo vale decirlo, de revivir una vieja rivalidad como la de unitarios contra federales (por el fallo que devuelve recursos a CABA).

En la citada cumbre de intendentes y funcionarios de la ciudad balnearia no recibió un apoyo taxativo a sus aspiraciones a reelegir pero sí pudo dejar un mensaje que considera fundamental para que el FdT llegue “competitivo” a las elecciones: reclamó terminar “con el fuego amigo” y salir a defender la gestión.
 
Bajar la incertidumbre

Sergio Massa sigue apostando a bajar la incertidumbre de la economía como forma de ir posicionándose en la grilla de candidatos presidenciales. El titular del Palacio de Hacienda comenzó con las negociaciones “informales” con algunos líderes de la CGT para intentar concertar una pauta salarial que contenga las expectativas inflacionarias. El primer test será la revisión paritaria de los estatales nacionales prevista para mediados de mes.

Si bien el líder del Frente Renovador se mantuvo alejado de la polémica con la Corte, sus delegados en la comisión de juicio político de Diputados votarían en favor del inicio del proceso. Esa ambigüedad es la que, de alguna manera, mantiene su alianza estratégica con el kirchnerismo.

En Juntos por el Cambio salieron a alertar “por el circo” en el que se transformaría esta comisión de la Cámara baja que podría desde citar a los cortesanos hasta ventilar detalles sobre su privacidad. Pese a los tambores de guerra que hizo agitar esta semana el oficialismo, aún no hay convocatoria a sesiones extraordinarias del Congreso.

Y es probable que hasta febrero próximo no haya actividad parlamentaria. Se percibe un clima de confrontación que seguramente será acrecentado por el año electoral y hace prever para 2023 una acotada actividad en ambas cámaras del Parlamento. 

En el PRO sigue el operativo de control de daños que motorizó la filtración de los chats del ministro D’Alessandro. Hay una coincidencia en que esos supuestos testimonios, extraídos por “pinchaduras ilegales”, no tienen ninguna validez legal.

Pero, de todos modos, surgieron algunas diferencias por el manejo que le dio Horacio Rodríguez Larreta a una crisis política que, para “Lilita” Carrió, hizo necesaria una mayor firmeza del alcalde porteño en el respaldo a su ministro de Seguridad. La titular de la CC acusa al general retirado César Milani de estar detrás de las maniobras.

Recorridas en la Costa

El alcalde porteño comenzó sus recorridas de precampaña por la Costa Atlántica. Una de las paradas fue Pinamar donde en la semana coincidieron varios dirigentes nucleados detrás de la candidatura de Patricia Bullrich, que mostraron optimismo respecto al actual posicionamiento de la ex ministra de Seguridad. Sin embargo, aseguraron que “todos” los dirigentes del espacio deberán encolumnarse detrás del ganador de la interna.

Larreta sigue firme en sus ambiciones, pero recién lanzaría formalmente su precandidatura a la presidencia a fines de febrero próximo. Ayer se dejó ver en Mar del Plata con un aliado como el senador radical Martín Lousteau y con el titular del radicalismo, Gerardo Morales, como gesto de unidad.

El debate por las “fórmulas cruzadas” está más que vigente en el armado opositor. Y será uno de los tópicos de la cumbre de la UCR de mañana en La Feliz que, convocada por el gobernador jujeño, no tendrá asistencia perfecta: no estaría Facundo Manes pero si su hermano Gastón, titular de la Convención Nacional, y tampoco Alfredo Cornejo, titular del interbloque de JxC en el Senado. La estrategia electoral del centenario partido aún está lejos de ser acordada por sus máximos referentes.

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