El equipo de curas de villas y barrios populares de la ciudad de Buenos Aires y el GBA advirtieron que “los dramas sociales irresueltos de la vivienda y el trabajo representan hoy un grito estremecedor”, lamentaron que las necesidades de los más necesitados no tengan lugar en la agenda política y los debates de campaña, y consideraron que “la desconexión de algunas dirigencias políticas con el dolor del pueblo resulta pasmosa”.
En una declaración con motivo de haberse cumplido este jueves un nuevo aniversario del nacimiento del padre Carlos Mugica (hoy cumpliría 91 años), titulada “La vivienda del pueblo: una asignatura pendiente”, los sacerdotes hacen eje precisamente en el problema habitacional, no solo para la compra de un terreno, sino también para el pago de un alquiler, y señalan un crecimiento de la brecha entre ricos y pobres.
“Cada día los alquileres tienen requisitos inalcanzables para más gente”, afirman. Y agregan: “Comprar un terreno o una vivienda representa una empresa absolutamente desproporcionada para el sueldo promedio de un obrero, y estamos hablando de alguien que tiene un trabajo formal.”
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