El vuelo que une Córdoba con las Islas Malvinas, proveniente de la ciudad brasileña de San Pablo, comenzó a operar ayer y, en protesta, integrantes de la Asociación de Personal Aeronáutico (APA) realizaron asambleas en el aeropuerto cordobés Ambrossio Taravella.
El viaje pudo concretarse luego de que un juez federal confirmara que se trataba de un “vuelo de cabotaje” entre dos provincias argentinas, Córdoba y las islas que pertenecen a Tierra del Fuego, tras un reclamo de abogados porteños que advertían sobre la posible afectación al mandato constitucional de sostener el reclamo de soberanía en las islas que siguen bajo dominio de Gran Bretaña.
El vuelo a Malvinas, a cargo de la empresa Latam, partió desde San Pablo a las 6.59, arribó a Córdoba a las 10.15 para, luego de una escala, partir rumbo a las islas Malvinas a las 12.30, a donde arribó luego de cuatro horas y 25 minutos.
AEROCOMERCIAL
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