None
Alberto Fernández llegó con su comitiva a territorio mexicano donde mantendrá diversas reuniones.
VISITA A MÉXICO

Alberto Fernández empieza a delinear la política exterior del futuro gobierno

Mañana se reunirá con el presidente Manuel López Obrador y mantendrá encuentros con empresarios.

En su primer viaje internacional tras su victoria en las urnas, el presidente electo, Alberto Fernández, arribó ayer sábado a la ciudad de México con el fin de reunirse con el mandatario local, Andrés Manuel López Obrador, y mantener encuentros con empresarios y dirigentes locales, con lo que empieza a trazar el camino de su política exterior.
El dirigente peronista viajó en el vuelo AM029 de Aeroméxico, que partió del Aeropuerto Internacional de Ezeiza "Ministro Pistarini" y arribó a las 9:45 de la Argentina a la terminal "Benito Juárez" de la ciudad de México.
En la visita al país azteca, Fernández comenzará a delinear su diplomacia, en momentos de tensión con Brasil y de posibilidad de acercamiento a Estados Unidos, tras el llamado telefónico que recibió el pasado viernes de parte del mandatario norteamericano Donald Trump.

Encuentro privado
El día clave será el lunes, cuando tiene previsto reunirse con López Obrador, en el Palacio Nacional a las 11 hora local (8 en la Argentina): será un encuentro privado y sin protocolo, ya que Fernández aún no tomó posesión del cargo.
"López Obrador es una referencia de lo que tiene que ser un proceso de profundización de la integración latinoamericana.  México puede cumplir un rol muy importante en tratar de liderar junto con Argentina esta nueva etapa que se abre en Sudamérica", sostuvo el coordinador de los equipos técnicos del Frente de Todos, Nicolás Trotta.
En la agenda de Fernández también figuran reuniones con el jefe de Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, y con el poderoso empresario Carlos Slim, uno de los hombres más ricos del mundo.
Su paso por México incluye, además, una conferencia magistral el martes a las 18 en el Antiguo Colegio de San Ildefonso, en el marco del Programa Universitario de Estudios sobre Democracias, Justicia y Sociedad de la UNAM.
Al llegar al aeropuerto, Fernández fue recibido por el embajador de la Argentina en México, Ezequiel Sabor, y por el secretario para Asuntos Latinoamericanos de la cancillería de ese país, Maximiliano Reyes Zúñiga, con quien posó para una foto con una remera de la Selección Argentina del Mundial de Fútbol de 1986 que le regaló del funcionario.
Algunas señales 
 El presidente electo subió al avión al diputado nacional Felipe Solá, quien lo acompañó en cada uno de sus viajes al extranjero, por lo que crecen las chances de que sea designado canciller del próximo Gobierno.
El viernes, Solá evitó confirmar haber sido designado en el cargo, pero dijo que sería "un desafío fuerte si ocurre" y,  expresó: "Me estoy acostumbrando de a poco a la idea de ser el canciller".
En la comitiva también están Santiago Cafiero, que asoma como probable jefe de Gabinete; el ex funcionario bonaerense y dirigente del Grupo Callao, Miguel "Mike" Cuberos, otro habitual acompañante del presidente electo en los viajes al exterior; y el político e intelectual progresista chileno Marco Enríquez Ominami.
La elección de México como primer destino internacional obedece a la decisión geopolítica de Fernández de privilegiar el vínculo con los países de la región latinoamericana, sin descuidar las relaciones internacionales con otros Estados: asimismo, la coincidencia en la visión de la crisis de Venezuela también es otro de los factores que influyó a la hora de elegir al país azteca.
López Obrador fue uno de los primeros presidentes que felicitó por teléfono a Fernández el domingo pasado cuando se confirmó el triunfo electoral: en dicha conversación telefónica acordaron la visita.

Bolsonaro baja el tono
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, moderó ayer sábado sus críticas al mandatario argentino electo, Alberto Fernández, y se mostró dispuesto a trabajar para resguardar la relación bilateral. Incluso, reveló que no descarta enviar a un representante para la ceremonia de asunción del nuevo Gobierno. 
El cambio de discurso de Bolsonaro se produce un día después del llamado telefónico que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, le hizo a Fernández para felicitarlo por su victoria electoral y para manifestarle su disposición a encarar un trabajo conjunto.
Bolsonaro subrayó que su voluntad es "mantener el comercio" bilateral y dejó abierta la posibilidad de enviar a un representante al acto de traspaso de mando en Argentina. "Si alguien quiere ir allá, es sólo hablar conmigo. Si hubiese algún voluntario... está libre de ir. La Argentina necesita de nosotros también. Nosotros de ellos y ellos de nosotros", resaltó.

COMENTARIOS