Carrió presentó un proyecto para evitar los sobreprecios en supermecados

La “Ley Góndola” busca acotar el impacto de los precios sobre las clases media y baja. Además, propone que haya un manual para exhibir las ofertas.

La líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió presentó un proyecto para instaurar una “ley de fomento de la competencia en la cadena de valor alimenticia” y así lograr acotar el impacto de los precios sobre las clases media y baja.

La medida, que fue delineada tras denunciar la falta de una leche incluida en el programa Precios Cuidados, tiene como principal objetivo evitar los casos de abuso de posición dominante en los que pudieran incurrir los supermercados y otros grandes proveedores.

“La presente ley será de aplicación a la totalidad de las relaciones comerciales en la que intervengan los operadores de la cadena de valor alimenticia y cuyo objeto esté vinculado en forma directa con el proceso desde la producción hasta la distribución final de alimentos y productos alimenticios”, establece el segundo artículo del proyecto al que accedió Clarin.

Entre los objetivos de la iniciativa, Carrió busca “aumentar el beneficio a los consumidores”, “resguardar el equilibrio de la cadena de valor”, “contribuir a la transparencia de los precios”, “promover una mayor concurrencia de marcas” y “fomentar el acceso al consumo sustentable”.

Además, la Ley Góndola plantea que el Estado debe intervenir en el monitoreo y control del proceso de formación de precios en los supermercados y crea un código obligatorio de buenas prácticas comerciales para las principales cadenas de supermercados del país y también un observatorio de precios.

Cabe recordar que no es la primera vez que Carrió busca impedir las prácticas abusivas que afectan el consumo de las clases medias y bajas.

De hecho, el año pasado, la líder de la Coalición Cívica el año pasado había logrado aprobar, junto al titular del interbloque Cambiemos en Diputados, Mario Negri, su proyecto de ley de Defensa de la Competencia que prevé sancionar la cartelización.

“La podríamos llamar la ley del chivo, porque en el medio de la inflación fui a comprar un chivo y valía 6000 pesos, cuando en ojo de agua vale 600 pesos. ¡Lo pagué en dos cuotas!”, dijo en Diputados, durante la sesión en la que se aprobó la iniciativa, en la que también llamó a boicotear a los supermercados.