FAMILIARES

“Si están muertos que traigan los cuerpos”

El ministro de Defensa Oscar Aguad reconoció, en una entrevista, que los 44 tripulantes del ARA San Juan están muertos. Es la primera vez que lo asume un funcionario del Gobierno. Sus palabras fueron rechazadas por varios familiares de los marinos, que ayer a la mañana expresaron su enojo ante los medios.
“A Oscar Aguad le digo que tenga tacto y respeto por la gente”, suplicó Sandra, cuñada del submarinista Cristian Ibáñez, en diálogo con radio La Red. “Me parece desubicado ir a dar ese tipo de noticias en la tele. Primero debería hablar con las familias. Desde el primer día que la comunicación es mala”, agregó.
“Yo me tengo que ir a trabajar, mi hermana no va a la base, mi sobrina aún no sabe que su papá se murió, ella cree que lo están buscando. Cada uno en su casa, es un sufrimiento de a poco. Es un bajón, acá estamos en un limbo, en una espera”, señaló la mujer.
Ante la consulta de si le quería decir algo a Aguad, respondió que “este ministro no tiene mucha idea, es un balde de agua fría, no tiene idea de nada, esa sensación tengo. Lo que le digo es que tengan respeto. Al Presidente le pido que busque la transparencia para las familias. No tienen idea de cómo es la Armada. Le digo que tenga tacto y respeto por la gente porque está sufriendo”.
También se refirió al tema Claudio Rodríguez, hermano mayor del submarinista Hernán Rodríguez. Ayer habló con Radio Latina sobre los dichos de Oscar Aguad. “El viernes no dijo que estaban todos muertos. Dijo que se iba a buscar, explicó por qué se había abandonado. Le preguntaría cómo sabe si están muertos y dónde están”, señaló. “La esperanza no la voy a perder nunca. A los mineros los sacaron a los 17 días. Hasta que no vea el barco roto no voy a pensar lo contrario”, continuó el pariente.
Por su parte, Marta Vallejos, hermana del sonarista Celso Vallejos, reiteró su confianza de que los 44 tripulantes están con vida y manifestó que, hasta que no sean encontrados los cuerpos, no cambiará su “forma de pensar”. “Ellos dicen técnicamente que están fallecidos pero, ¿dónde está escrito? ¿Cómo saben que están fallecidos? ¿Qué son, videntes? Si están fallecidos, que traigan los cuerpos”, planteó en declaraciones.
La mujer lleva adelante su décimo día de ayuno “hasta que vuelvan” los 44 tripulantes. “No voy a parar ni a bajar los brazos, voy a mover cielo y tierra para traer a mi hermano. Insisto en que para mí están vivos”, sostuvo. Abrazada a su fe religiosa, remarcó: “Dejo en manos de Dios; lo que decida para mí está bien. La última palabra la tiene Dios, no (el presidente Mauricio) Macri ni (el ministro Oscar) Aguad”.
Los familiares de la tripulación ya habían sido críticos con el Gobierno durante la marcha que organizaron por el centro de Mar del Plata. Unas 50 personas fueron hasta la catedral para hacer una oración por los 44 tripulantes y reclamaron la presencia del presidente Mauricio Macri. “Que esté acá, porque la prioridad es esto, no el G20, son las 44 familias detrás de esta situación”, sostuvo Marcela Fernández, esposa del suboficial Alberto Sánchez.