Aunque la Corte Suprema de Justicia condenó al padre Julio César Grassi a 15 años de prisión por abuso sexual y corrupción de menores, un nuevo fallo lo benefició con el cómputo del 2x1 por cada día que pasó sin condena firme. De este modo, estará preso 9 años en lugar de la pena total.
Según confirmó el abogado querellante, Juan Pablo Gallego, el mismo tribunal que lo condenó en primera instancia había realizado un cálculo de la pena a cumplir y determinado que a Grassi le restan cumplir aún nueve años en prisión, por lo que estará detenido hasta el 10 de agosto de 2026. Saldrá un año y 9 meses antes de lo que estaba previsto por la condena.
Grassi estuvo en la cárcel desde el 23 de octubre al 21 de noviembre de 2002; luego permaneció bajo prisión domiciliaria entre el 7 de marzo de 2012 y el 31 de mayo de ese año. Finalmente fue otra vez apresado el 23 de setiembre de 2013, hasta la actualidad.
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