Macri regresa a Buenos Aires y lo espera un martes complicado de marchas

El presidente Mauricio Macri regresó anoche a Buenos Aires después de pasar el fin de semana largo en Villa La Angostura, junto a su familia y amigos, entre los que se sumó la gobernadora María Eugenia Vidal.
El mandatario viajó el viernes a la tarde rumbo a la provincia de Neuquén, para pasar allí el Día del Niño junto a dirigentes de Cambiemos y personas de su círculo íntimo. 
Una reducida comitiva  acompañó al Presidente durante su reposo en el country Cumelén, en las afueras de Villa La Angostura.
Macri se sometió la semana pasada en el Sanatorio Otamendi a una nueva operación en la rodilla derecha, la segunda en poco más de un año, y fue dado de alta el mismo día. Tras 48 horas de reposo, decidió instalarse en el Sur. 
A su regreso, deberá lidiar con la masiva marcha que organiza la CGT, las CTA, agrupaciones sociales y de izquierda a Plaza de Mayo. Además, deberá enfrentar la difusión de datos económicos clave del Indec y la UIA.
La entidad fabril revelará un crítico informe sobre el impacto negativo del incremento de tarifas y del aumento en el ingreso de importaciones de productos manufacturados desde Brasil, China y otros países en un mercado con demanda deprimida. Los datos del Indec serán más alentadores. 
Por su parte, Vidal se sumó al grupo que acompañó al jefe de Estado y se mostró, distendida, de paseo por la avenida Arrayanes y se tomó fotos con turistas y vecinos que la pararon. La mandataria provincial también retornó ayer para retomar las actividades oficiales en la Provincia el día de hoy.
No se descarta que Macri y Vidal hayan analizado en el sur los resultados en las Pasos, y la performance del oficialismo en el interior del país y en la provincia de Buenos Aires. Asimismo se define la estrategia de cara a los comicios de octubre, mientras en La Plata se avanza en el escrutinio definitivo en ese distrito, que estaría terminado el próximo fin de semana. En Cambiemos, hay un consenso generalizado de minimizar el margen de error para captar a los votantes de otros candidatos, en especial de Sergio Massa. Hay un creciente optimismo en el oficialismo por el resultado en municipios de la primera y la tercera sección electoral, claves en territorio bonaerense. En el Gobierno admiten que no hay lugar para equivocaciones, mientras se analizan posibles cambios después de las elecciones. Las opciones van desde retoques en el gabinete y enroques entre la Casa Rosada y la Gobernación bonaerense, hasta correcciones en la gestión para mostrar mejores resultados.