Los delegados rechazaron la oferta de Kraft y se reunieron con Moyano

El secretario general de la CGT, Hugo Moyano, se metió de lleno en el conflicto de Kraft-Foods al "solidarse" con los más de 150 trabajadores despedidos por la empresa alimenticia, tras el fracaso de un intento de acuerdo en el Ministerio de Trabajo de la Nación.
La CGT respaldó ayer los reclamos de la comisión interna de los trabajadores de Kraft y anunció que apelará a "aciones judiciales" y se contactará con la embajada de Estados Unidos en pos de solucionar el conflicto.
El dirigente Julio Piumato dijo a Télam que "la CGT buscará que la empresa cese la coacción a los trabajadores, reintegre a todos los despedidos y pague los salarios adeudados".
Más temprano, y luego de negarse a firmar un acuerdo en el Ministerio de Trabajo, los delegados de la comisión interna de Kraft Foods marcharon hacia la Plaza de Mayo para llevar "al centro político de decisión" el conflicto por los trabajadores despedidos.
"Queremos que el Gobierne actúe como corresponde y defienda nuestros puestos de trabajo. Marchamos hacia el centro político de decisión para llevar este problema", convocó el delegado Ramón Bogado.
Además de pedir que sean reincorporados todos los trabajadores despedidos, los delegados piden que salga la Policía que está dentro de la planta controlada por intereses norteamericanos.

Cortes y reclamos

Anoche, agrupaciones estudiantiles y políticas de izquierda realizaron una nueva protesta afrente a la sede de la Unión Industrial Argentina, donde interrumpieron el tránsito y provocaron algunos destrozos, en apoyo a los trabajadores despedidos de Kraft. También hubo cortes en Puán y Pedro Goyena en el barrio de Caballito y en avenida Córdoba y Azcuénaga, a metros de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires.
Más temprano, manifestantes del MST, el Polo Obrero, la Izquierda Socialista y la FUBA provocaron un caos de tránsito en avenida 9 de Julio al cortar tres carriles a la altura de avenida Corrientes.