Política, fútbol y millones

Los vínculos entre la política y el fútbol abren paso a todo tipo de situaciones. Por caso, la designación del escribano y representante Gustavo Arribas, un amigo íntimo de Macri, en la AFI. O el hecho de que Eugenio Burzaco –futuro secretario de Seguridad- deberá localizar a dirigentes que el FBI pidió detener tras la declaración reservada de su hermano Alejandro.
El empresario se encuentra detenido en los Estados Unidos, desde donde apuntó contra dirigentes argentinos como José Luis Meiszner, hombre de confianza de Aníbal Fernández, que tenía un cargo clave en Conmebol y que por años fue un fiel seguidor de Julio Grondona. Tanto la AFA como los clubes reciben fondos millonarios por el programa estatal Fútbol para Todos.