El ministro de Economía, Axel Kicillof, aseguró que el Gobierno que asuma el próximo 10 de diciembre recibirá "una economía en crecimiento" y con una "fuerte desaceleración de la inflación".
Además, admitió que "no pagar nada a los fondos buitre es imposible", y señaló que están "trabajando en una negociación como fue la (estatización) de YPF". "El término herencia económica es bastante amplia. Casi todo gobierno que toma el mando dice 'tengo una herencia muy pesada, muy difícil de resolver', y el próximo dudo que pueda decir eso. Van a recibir una economía en crecimiento", aseguró Kicillof en declaraciones a la prensa.
El precandidato a diputado nacional en la ciudad de Buenos Aires marcó las diferencias entre el inicio del futuro gobierno y el 2003, cuando asumió Néstor Kirchner, y resaltó que "una gran mochila que suele ser la deuda" está más aliviada, ya que se encuentra "en el 40 por ciento del PBI". Kicillof también mencionó el avance "en la industrialización, en inclusión social, el PBI se ha duplicado", y afirmó que "son tantas y tantas cosas que el gobierno que asuma va a tener a disposición desde el punto de vista de los instrumentos, desde el punto de vista del capital social recuperado".
"El gobierno que venga va a recibir un año más de nuestra economía en un contexto internacional que es muy complejo", agregó. Durante la charla, el funcionario también se refirió a la inflación, y reiteró que hay una "fuerte desaceleración" con respecto al año pasado.
"Los números me dan más bajo del 25 por ciento. En el Presupuesto dijimos 15 por ciento, y la oposición decía 40. Ahora decimos 18 ó 20 por ciento, para dar un margen, y la oposición dice máximo 25. Yo lo que veo es una fuerte desaceleración de la inflación. Sería mejor que continúe la desaceleración, por supuesto, y trabajamos para eso", señaló.
El ministro minimizó además el déficit fiscal que muestra la economía argentina, al asegurar que es "menor" al de Estados Unidos y al de los países de la región, y dijo que responde a medidas "anticíclicas".
Por último, se refirió al conflicto con los fondos buitre, admitió que "no pagar nada es imposible", y aseguró que están trabajando "en una negociación como la de YPF". "Pagarles lo que piden es imposible, es una trampa. No pagar nada, es imposible. Y entonces estamos trabajando en una negociación, como fue lo de YPF", indicó.
De todas formas, resaltó el apoyo "de casi todos los países del mundo" que recibió el Gobierno durante el conflicto, aseguró que los holdouts "están bastante desinflados", y que deberán "aceptar las condiciones para llegar a un acuerdo" porque "no tienen una espada de Damocles sobre la Argentina, sino un escarbadientes".
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