Boccia o bochas apartadas es el deporte que practican las personas con discapacidad en Junín. Los entrenamientos son coordinados por la entrenadora Evangelina Pérez, en las instalaciones de la Sociedad de Fomento del Barrio Municipal 144 Viviendas.
El objetivo del juego es intentar ser lo más preciso y estratega posible, donde cada jugador tiene que procurar arrimar las bochas a la bola blanca. Cecilia Bersagnini, Natalia López, Camila Avaca y Christian Torres son los bocheros juninenses.
Pérez dialogó con Democracia sobre sus comienzos en el deporte que enseña todos los jueves en la Sociedad de Fomento del Barrio 144.
“Al deporte lo conocí en un congreso paralímpico en Córdoba. Justo en ese momento estaba buscando una actividad para un alumno que estaba en silla de ruedas”, contó.
“Mi primera alumna en Junín fue Cecilia Bersagnini, ella es categoría BC3, y es vecina de mi mamá. Me acerqué y le pregunté si quería practicar el deporte, por suerte le gustó la idea”, comentó.
“Los entrenamientos con Cecilia los hacíamos en el patio de su casa, hasta que, en 2019, la comisión del Barrio Municipal 144 Viviendas nos brindó las instalaciones de la Sociedad de Fomento”, recordó.
La entrenadora de boccia, que en la actualidad cuenta con cuatro alumnos, indicó lo que busca en el deporte y el ambiente positivo que rodea a la disciplina.
“Lo que busco en mis alumnos es que la pasen bien y estén felices. Además, quiero que intenten superarse y la competencia quede al margen”, afirmó.
“El ambiente de este deporte me gusta mucho, porque los chicos te hacen parte. Se asemeja a una familia”, remarcó.
La actividad cuenta con cuatro categorías: BC1 (el deportista tiene parálisis cerebral y necesita que una persona lo asista); BC2 (también con parálisis cerebral, pero con la capacidad de mover sus brazos y el tronco del cuerpo); BC3 (pueden tener parálisis cerebral u otra discapacidad más severa y se ve imposibilitado de realizar los tiros por la nula movilidad del tronco y sus brazos) y BC4 (incluye a jugadores sin discapacidad cerebral, pero con dificultades en sus brazos o ausencia de extremidades).
Pérez explicó los beneficios que les brinda la práctica del deporte a los chicos que padecen alguna discapacidad.
“Gracias a la práctica de la disciplina ellos recuperan fuerzas, se vuelven más independientes y mejora la concentración, porque es un deporte donde la estrategia juega un rol fundamental”, contó.
Bersagnini, la primera alumna de Pérez, participó por primera vez en una competición de bochas adaptadas en 2019, en los Torneos Bonaerenses, aunque no logró superar la etapa Regional en aquella oportunidad.
Ese mismo año la invitaron a disputar un torneo en Castelar. Allí está la Liga del Oeste, que la conforman distintos municipios del Gran Buenos Aires, y aunque la performance no fue positiva, su entrenadora tiene un grato recuerdo de esa experiencia.
La entrenadora de la disciplina comentó cómo recaudaron los fondos para la compra de materiales, y se refirió a la comisión directiva del Barrio 144.
“Para poder comprar los materiales necesarios para la práctica del deporte realizamos una rifa para el día del trabajador. Cada jugador tiene que tener sus respectivas bochas”, afirmó.
“No somos un club, somos los bocheros de Junín, porque aún no tenemos una entidad. De todas formas, los padres de cada uno de los chicos formaron una comisión para poder recaudar fondos”, narró.
“Héctor Espina, presidente de la comisión directiva, nos ayudó mucho, ya que nos da el espacio para poder practicar el deporte y visibiliza la actividad en Junín”, expresó Pérez.
La encargada de impulsar la disciplina manifestó el deseo de realizar algún campeonato en Junín, aunque comentó que “para poder realizarlo debo contemplar varios puntos importantes, como, por ejemplo, la presencia de una ambulancia y un sitio preparado para recibir a los jugadores”.
El próximo compromiso que tienen por delante los bocheros juninenses será el 24 de junio, cuando disputen la “Copa Chacabuco”.
Por último, la impulsora de la actividad en Junín habló sobre las expectativas que tiene a futuro, y contó que personas que pueden practicar el deporte.
“A futuro quiero que el deporte se conozca en Junín. No busco sacar deportistas de alto rendimiento, lo que intento es que visibilice la disciplina y puedan ser más las personas que lo practiquen”, manifestó.
“No hay una edad límite para practicar la disciplina. Este deporte es inclusivo, porque lo pueden jugar personas que no tienen ninguna discapacidad. Está abierto para todos los que lo quieran conocer”, finalizó.
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