Sarmiento volvió al triunfo con una goleada ante Temperley y continúa en el liderazgo

Para Sarmiento fue la mejor manera de rehabilitarse del traspié del pasado martes con Almagro. Lo hizo con una goleada por 4-0 ante Temperley como para recuperar confianza y seguir en el liderazgo junto a Colegiales, que había ganado su partido el último sábado.
Un equipo dirigido técnicamente por Sergio Lippi que en esta oportunidad se caracterizó por su contundencia y saber sacar casi el máximo rédito de sus jugadas delante del arco contrario.
Si bien no llegó a tener la solidez defensiva de otras veces y la visita anduvo cerca de marcar en más de una ocasión, lo cierto es que la precisión del once juninense desde mitad de cancha hacia delante dejó, al menos ayer, en el segundo plano fallas que se tuvieron a la hora de defender y sobre las cuales seguramente el cuerpo técnico trabajará en los próximos días.
El partido comenzó a pedir de Sarmiento. Al minuto de juego consiguió abrir el marcador. Una linda definición de Tucker al capturar un rebote en un tiro de esquina.
Desde el primer tiempo quedó en claro que el conjunto juninense era uno cuando atacaba y otro cuando defendía. Es decir, cuando tenía la pelota y lograba meterla en campo contrario insinuaba peligro porque aparecía la conducción de Quiroga, la movilidad de Cerutti y las proyecciones de Dematei. Sin el balón, surgieron problemas defensivos por los costados y a la espalda de Maidana.
Temperley consiguió por momentos preocupar, aunque fue un equipo que generalmente se diluyó en el área contraria y fueron muy pocas sus llegadas con claridad.
Sarmiento cuando halló precisión en los metros finales del ataque, no perdonó y marcó el segundo gol, donde Quiroga terminó empujando a la red.

Un “Verde” eficaz

El segundo tiempo comenzó con Temperley adueñándose de la pelota y jugando en campo contrario. Con el empuje de Patricio González y el fútbol que le aportó Marclay en esos primeros minutos. De esta manera, el “Celeste” generó al menos tres llegadas y todas con envíos aéreos sobre el área defendida por el arquero Adrián Villa. Claro que, la visita no concretó y Sarmiento definió cuando llegó.
Apareció Cerutti con una gran jugada individual, le cometieron penal y Tucker concretó la pena máxima para poner el tres a cero.
Después una nueva acción destacada del “7” del “Verde” con otro desborde y le sirvió el gol a Cuevas, que marcó el lapidario cuatro a cero.
Hasta Aillapán se perdió el quinto al quedar mano a mano con el arquero Medina y a Temperley ni siquiera le salió el tiro del final porque un cabezazo de Marcos Giménez se estrelló en el travesaño.
Sarmiento recuperó la sonrisa y la punta, aunque no debe confiarse tras esta goleada y todo el plantel debe ser consciente que hay aspectos por corregir.