Al término del partido el entrenador de Sarmiento, Iván Delfino, dialogó con la prensa y reconoció que en líneas generales el empate de su equipo frente a Instituto de Córdoba "fue justo".
Desde su óptica, analizó: “Fue un partido difícil. Sabíamos que podría presentarse de esta manera. Tratamos de equiparar la dinámica de ellos en el medio campo, lo hicimos durante los primeros quince minutos del partido, después nos descolocamos un poco y Navarro nos hizo correr de un lado para el otro".
Agregó: "Ellos se encontraron con un gol al final del primer tiempo. Nosotros tuvimos nuestras oportunidades para abrir el marcador mucho antes y no las pudimos aprovechar".
"Después, en el segundo tiempo, el desgaste fue todo nuestro. Había que tener cuidado cuando nos robaban la pelota porque son muy verticales en el juego, esa es su característica. Y eso lo hicimos muy bien", completó el DT del Verde.
Para cerrar con sus apreciaciones, señaló: "Lo fuimos a buscar, a veces con buen juego y otras poniendo más convicción. Llegó el empate, merecido por cierto, y en otra pelota casi lo ganamos".
"En líneas generales, el empate fue justo, pero nosotros nunca dejamos de buscar la igualdad y después tiramos el último manotazo para tratar de quedarnos con los tres puntos. Hicimos un buen segundo tiempo", finalizó.
"Nos quedamos con un punto valiosísimo"
El gran héroe de la jornada sin dudas fue el buen volante Leonardo Villalba, quien ingresó en el complemento para poner la igualdad. Sobre el partido, el mediocampista dijo: “Estoy muy contento con el empate y con poder mantener el invicto. Tuvimos unos primeros minutos impecables donde se mantuvo el orden y se jugó prolijo, luego perdimos la pelota y el mediocampo".
Añadió: "Ellos tienen muy buenos jugadores, que tratan bien la pelota y te complican permanentemente. En el segundo tiempo fuimos más ordenados y prácticos, por eso llegamos al gol y nos quedamos con un punto valiosísimo".
Villalba también indicó: "El fuerte nuestro es el juego y la presión, lo cual se logró en varios pasajes del segundo tiempo. Pero a su vez habíamos trabajado en la semana sobre el cinco de ellos, Navarro, que es el que le genera mucho juego. Entonces hubo que combinar defensa con un ataque punzante y en algunos pasajes se pudo lograr".
Para finalizar, sobre su tanto, el volante dijo: "El gol se lo dediqué a mi familia, mi viejo, vieja, mi señora y mi hija. Después en el banco me fui a abrazar con Raúl (Lazarte), él me había dicho que iba a hacer un gol y cada vez que abre la boca se cumple. Es como un santo para mí”.
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