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FÚTBOL

Walter “Pejerrey D” Destéfani

El artillero Ferroviario de los ´70. Ganó dos nocturnos con BAP. Jugó en varios clubes de la zona y brilló en Natación.

Nací en Newbery y Primera Junta, frente a la garita de la vía. A los dos años compraron mis viejos en Quintana y Remedios de  Escalada. Entonces hice la primaria en la escuela 24 y el secundario en el Comercial.
En el barrio se jugaba al fútbol mañana, tarde y noche. En la placita donde ahora está Telefónica había una cancha que la hicimos un día con todos los vagos del barrio. Una noche empezamos a levantar adoquines y se armó la canchita de fútbol. Había otra a dos cuadras, enfrente de Larroza por General Paz, estaba la de la quinta de patinaje, otro donde venían los circos que hoy está la plaza de los chicos. Para el otro lado, una a tres cuadras de la escuela 24 donde había una aserradero en López y Planes y 9 de Julio.
En BAP empecé a jugar a los 6, pero me ficharon a los nueve. Por parte de mi vieja tenía todos los familiares en aquel barrio, entonces salía de la escuela y con cinco años agarraba la bicicleta por calle Hipólito Irigoyen –que era doble mano en ese tiempo- y me iba a jugar allá, hasta que una tía a las 6 de la tarde me recordaba que me tenía que volver.
En BAP estaba el Sordo Ramos y don Juan Torelli. Torelli fue una institución, el día que faltaba no había matecocido para los chicos, ni duchas porque nadie prendía la caldera. Para calentar la caldera llevaban gomas viejas de auto, bicicletas, motos. Todo servía.
Había un galpón grande, tipo ferrocarril, que era la cantina. Se movía para todos lados, pero nunca se cayó. Estaban las plantas de nueces que tenían como 20 metros de alto cada una y en la época todo el mundo se subía a bajarlas para llevar a sus casas.
Al año de estar en BAP empecé a hacer natación en el Newbery. Te decían en ese entonces que no era compatible la natación con el fútbol, que el que hacía una cosa no podía hacer otra. Mentira. A mi no me pasó nada de nada. Estuve nadando hasta los 18. Logré más de 400 medallas, hice tres cruces de la Laguna. Fui campeón Argentino en Bahía Blanca representando a la zona 9 que era Junín, Chacabuco, Jáuregui, Pergamino, que eran los que teníamos pileta. De 32 carreras, ganamos 31. De los tres cruces de la laguna, en 1971 fui segundo, en 1972 no había agua y no se hizo. En el´73 fui tercero y ´74 salí segundo porque me fui al medio de la laguna, no tenía guía y me ganó por poco Tatato Moccagatta. Pero la más linda de todas fue la que salí tercero. A mitad de camino se acalambró Juanjo Paz, paré para ayudarlo y quería abandonar. Lo convecí para que siga y en los últimos cien metros fue a cara de perro. Me ganó por poco.
En BAP fui campeón con la sexta, pasé a la reserva donde salimos campeones dos años seguidos. Uno en forma invicta, que fuimos con Falabella los goleadores del campeonato. Y después quedé ascendido porque cuando jugabas tres veces en primera, no podías volver atrás.
A los 12 debuté en primera. Un cuadrangular nocturno en Moreno. Mi viejo siempre me iba a ver, pero ese día como no jugábamos porque éramos de la sexta se quedó jugando al naipe en la sede. Cuando volvieron todos lo felicitaban y no entendía nada. Hice dos goles y le ganamos  2 a 1 a Ambos Mundos. Al poco tiempo un campeonato de Mundo Nuevo en cancha de River faltaban algunos jugadores y me pusieron. Ese día jugué contra Porato, el hormiga Fernández, Reinaldo Caramelo que era un jugadorazo. Esa vez ganamos el campeonato. Después gané dos nocturnos con BAP.
Luego me fui a Belgrano de Arenales. Estaba Pepe Salvia de presidente. Fue uno de los mejores recuerdos que me quedó del club y de la gente. Jugamos un cuadrangular  apenas llegué y salimos campeones. Hacía como 30 años que al Arenales FC nunca le podían ganar. Fue 4-1. Una fiesta tremenda  y como los clubes estaban pegados, al lado era un velorio. Son las cosas del fútbol. Con ellos jugaban los famosos Boul, Medina, Buonanotte. Fuimos varios de Junín. Alcides Gubitosi, Rubén Catena, Carlos Maltisotto, el Bicho Leiva, y se hizo una amistad tan grande que parecíamos una familia de toda la vida.
Luego me fui a Newbery de Rojas, dos años y medio. Anduve muy bien, domingo por medio en promedio concretaba. Un día el técnico me dijo que me habían hecho una cama y me mandó al banco. Perdíamos, me puso en el segundo tiempo, hice dos goles y ganamos tres a uno. Terminó el partido, hice un bollo con la camiseta y se la tiré en la cara al presidente. No aparecí más.
Volví un año a BAP, estaba el Abuelo D´Anunzio como técnico y no me quería poner de 9. No jugué más y me fui a la zona. Estuve en Fortín Tiburcio, en Baigorrita con el famoso equipo de Tomino, Horacio Medina, Cillio  que después se fue a jugar a Racing, los Ruiz, Cariaca, Miguel Morán, Alfredo Casella en el Arco. Era la primera vez que Baigorrita presentaba un equipo fuerte.
Después me llevó el Canario Patiño a Origone. Cuando debuté en la cancha de Sarmiento, los hinchas me gritaban “largá los postres”. El técnico era Lucio Moyano y me ponía de 10, porque entendía que como le pegaba con las dos piernas, era el mejor puesto. Empecé a hacer goles. Un domingo le ganamos  6 a 1 a Villa en cancha de Origone y metí 5. Terminé con 18 goles en el campeonato y el goleador fue Naites de Rivadavia de Lincoln con 19.
Tenía 28 años y no jugé más. Agarré la raqueta y  me dediqué al Tenis en el club Rivadavia. Empecé en la cuarta, después tercera, luego a una segunda media especial que se mezclaban con los de primera. Gané unos cuantos torneos, fui campeón en dobles con mi hijo Enzo.
¿Maradona o Messi? Por como se jugaba en la época de Maradona, lejos el mejor. Hoy como se corre todos detrás de la pelota, Messi es el mejor del mundo.

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