Ocho directores técnicos renunciaron a su cargo en tan solo ocho fechas

Bastaron un par de meses para que se derrumbara un mito. Supuestamente, el torneo largo de la Superliga iba a traer tranquilidad para los cuerpos técnicos de los 28 equipos. El famoso “trabajo a largo plazo”, más a la usanza europea, iba a prevalecer, según las previsiones. Sin embargo, el carrusel de renuncias de directores técnicos se aceleró, al punto que con los alejamientos de Humberto Gronona (Arsenal) ayer a la mañana y el de la noche del lunes de Omar De Felippe (Vélez), ya son ocho los entrenadores que se fueron de sus clubes en apenas ocho fechas del certamen, que arrancó el 25 de agosto. Valga un repaso:
El 19 de septiembre Gustavo Matosas presentó su renuncia al cargo de entrenador de Estudiantes de La Plata y apenas se habían disputado tres fechas de la Superliga. Le siguió el 22 de septiembre, Diego Aguirre, técnico San Lorenzo después de la eliminación de la Copa Libertadores ante Lanús, por los cuartos de final. 
El 24 de septiembre, Nelson Vivas dejó Defensa y Justicia; el 17 de octubre se hizo oficial la salida de Sebastián Méndez de Belgrano, luego del empate 0-0 en el clásico con Talleres por la sexta fecha, mientras que el 17 de octubre se precipitó el adiós de Mario Sciacqua, que se fue de Olimpo, luego de quedar muy debilitado tras la caída ante Huracán por 2-0, que mantuvo al equipo de Bahía Blanca en zona de descenso. 
El 5 de noviembre, la dura goleada por 4 a 1 sufrida ante Defensa y Justicia fue demasiado para Gustavo Alvarez, que no resistió en Temperley, conjunto que se mantiene en los puestos del descenso; el 6 de noviembre, más allá de que el presidente saliente Raúl Gámez lo quería mantener en el cargo, Omar De Felippe presentó su renuncia indeclinable a la conducción de Vélez, que coquetea con los puestos de descenso después de una nueva derrota, en este caso frente a Unión de Santa Fe y como local, en tanto que el 7 de noviembre, luego de un comienzo de torneo con un triunfo, un empate y seis derrotas, Humberto Grondona dio un paso al costado y se alejó de Arsenal de Sarandí, el club vinculado íntimamente con su familia. Fue el más reciente, pero seguramente no será el último a lo largo del certamen.