Pol Fernández, volante de Godoy Cruz de Mendoza.
San Lorenzo recibe el martes a Universidad Católica.
LIBERTADORES

Una bodega de altas ligas

En una semana de plena fecundidad para los equipos argentinos que intervienen en la edición 58 de la Copa Libertadores de América, la nota más relevante la dio Deportivo Godoy Cruz Antonio Tomba, que con su victoria a expensas de Sport Boys de Bolivia ha pasado a liderar su grupo de forma invicta.
Esta es la tercera vez que el Tomba mendocino forma parte de la máxima competencia a nivel sudamericano (en 2011 y 2012 fue cuarto y tercero en su zona) y tal parece ser la vencida en su atesorada esperanza de meterse en los octavos de final.
Tras un resultado en apariencia desencantador, el empate 1-1 con Atlético Mineiro en el Estadio Malvinas Argentinas, el equipo conducido por el novel entrenador rosarino Lucas Bernardi dio el golpe de escena en Asunción frente a Libertad y anoche sacó adelante un compromiso que hasta el segundo tiempo se le complicó más de la cuenta.
Un gol de Guillermo Pol Fernández y otro de Javier Correa sellaron la conquista de tres puntos vitales que colocan al Tomba en el primer puesto y con grandes posibilidades de sellar su pase a la instancia siguiente, pero para eso deberá repetir la victoria a expensas de Sport Boys, en este caso la semana próxima en Santa Cruz de la Sierra.
Amén de Godoy Cruz, una especie de Cenicienta de la Libertadores, esta semana hicieron buena letra Lanús y Estudiantes, el vigente campeón nacional de forma contundente y los platenses con lo justo pero con el mérito de haberse impuesto al ganador de la Copa de 2016.
Lanús, que en el debut había sorprendido por una floja prestación que redundó en una derrota de 1-0 a manos de Nacional de Montevideo y luego dio la nota al vencer a Chapecoense en Brasil, confirmó que ha sabido refundarse en todos los indicadores: en determinación, en juego y en contundencia.
De ahí que haya aplastado por 5-0 al débil Zulia de Venezuela, mande en el Grupo 7 y se perfile para meterse entre los 16 mejores.
Diferente, por cierto, es el caso de Estudiantes, cuyas caídas en Río de Janeiro con Botafogo y en La Plata con Barcelona de Guayaquil representaban lo más parecido a una eliminación inexorable.
Ahora, sellada una victoria igual de ajustada que merecida ante Atlético Nacional y favorecido el reparto de puntos entre Barcelona y Botafogo, el "Pincha" ha quedado como mínimo en condiciones de dirimir por un cupo o, en el peor de los casos, quedar tercero y sumarse a la Copa Sudamericana.
De la mano de un curioso contraste generacional, Juan Sebastián Verón de 42 años y Juan Bautista Cascini, de 19, Estudiantes volvió a meterse en la pugna de los aspirantes a avanzar y gran parte de su destino estará cifrado en cómo le vaya el 2 de mayo en Medellín.
Los otros tres equipos argentinos se presentarán la semana próxima.
El martes, en el Nuevo Gasómetro, San Lorenzo se jugará la última carta versus Universidad Católica; en pos de escapar del último puesto del Grupo 5, Atlético Tucumán recibirá a Jorge Wilstermann el miércoles en el llamado “Jardín de la República” y el jueves River visitará a Emelec con el propósito de defender su liderazgo en el Grupo 3 y por qué no de asegurar su clasificación.
El jueves próximo también Godoy Cruz visitará a Sport Boys y Lanús a Zulia.