Un nuevo capítulo se abre en el controvertido fichaje del brasileño Neymar (expulsado anoche al cabo del partido ante Colombia) por el FC Barcelona: La justicia española abrió una investigación por “corrupción y estafa”, asestando un duro golpe en plena Copa América y a un mes de las elecciones a la presidencia del club.
La Audiencia Nacional, principal instancia penal española, investigará acusaciones del fondo de inversiones brasileño DIS - creado por Delcir Sonda, propietario de la cadena de supermercados brasileña que lleva su nombre-, contra Neymar Jr, su padre, el Barça y su antiguo club el Santos.
También son objeto de la querella el expresidente azulgrana Sandro Rosell y su sucesor Josep Maria Bartomeu, candidato a un nuevo mandato en las elecciones del 18 de julio.
La querella, por “corrupción y estafa”, fue presentada en España por este fondo que poseía el 40 % de los derechos deportivos de Neymar cuando jugaba en el Santos.
DIS, que también había lanzado acciones judiciales en 2014 en Brasil, ha reclamado con regularidad una parte de los beneficios reales de un traspaso según él minimizado por el Barça y el Santos.
El club catalán había anunciado inicialmente la operación por 57,1 millones de euros en mayo de 2013. Pero la justicia española estimó posteriormente la cantidad pagada por el Barça en al menos 83,3 millones de euros.
DIS, que recibió 6,8 millones de los 17,1 millones pagados por el FC Barcelona al Santos, se considera en su querella perjudicado de dos modos.
Primero, por un acuerdo entre Neymar y el Barça por 40 millones de euros, que según DIS impidió a otros clubs pujar por el delantero, vulnerando el libre mercado y pudiendo constituir un “delito de corrupción entre particulares”.
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