LIGA NACIONAL DE BÁSQUETBOL

Argentino visita a Quilmes de Mar del Plata

Juegan desde las 21.30 en el estadio del club Once Unidos.

Argentino se presenta por segunda vez en siete días en la ciudad de Mar del Plata. En esta oportunidad visitará a Quilmes en el estadio del club Once Unidos (Tomás Falkner  y Belisario Roldán).
El quinteto de nuestro medio buscará cortar la racha negativa de derrotas ante un rival que viene con una campaña extraordinaria.
Dirigen desde las 21.30 el capitalino Roberto Smith y el chubutense Julio Dinamarca.

Viene de perder

Quilmes cayó como local en su última presentación ante Weber Bahía Basket 81-77. Parecía que el Cervecero iba a terminar festejando una noche más en Once Unidos, escenario donde siempre se hace fuerte. Sin embargo, en un partido reñido, Bahía Basket aprovechó el mal cierre del “Cervecero”, y sorprendió en el final con el extranjero Ivory Clark, que con un triple y dos tapas fue determinante para la victoria 81 a 77, por la decimosegunda fecha de la segunda fase de la Liga Nacional de Básquetbol, devolución del interparejas.
El conjunto bahiense se desquitó de la caída ante los marplatenses el lunes pasado, y por segunda vez en la temporada se llevó una victoria de Once Unidos. Algo valioso, teniendo en cuenta que Quilmes sólo perdió 3 juegos como local, siendo 2 de ellos ante los dirigidos por “Sepo” Ginóbili.
Pese a contar con un impresionante Walter Baxley con 37 puntos (aunque con nulo aporte en el segmento final), Quilmes no pudo ante un rival que contó con mayor personal y rotación (seis relevos contra tres suyos).
Bahía Basket comenzó llevándose por delante a Quilmes. Al minuto y medio ya ganaba 10-0. Con los ataques a la pintura del ágil Nocedal y la potencia de Lisandro Rasio, la visita sorprendió a un desconcertado elenco marplatense, sin poder anotar con claridad y con problemas para defender el perímetro.
En medio del desconcierto, la figura de Walter Baxley fue el sostén en ofensiva. Diez puntos del norteamericano fueron lo único confiable del equipo en el segmento. Un doble y un triple del extranjero, cuando los bahienses parecían escaparse lejos (7-12). A los 5 minutos Ramella pidió tiempo muerto para reacomodar al equipo. Al reinicio, Romero y Baxley aportaron esperanzas, pero Bahía Basket estaba dulce desde el perímetro (5/6 en todo el parcial), con Nocedal (3/3) y Gaynor. Así la visita cerró con la diferencia máxima en cancha: 15-30 a su favor.
Quilmes logró enderezar el rumbo al inicio del segundo cuarto. Porque en tres minutos logró un parcial favorable de 11-0, destacándose el aporte de Tayavek Gallizzi (4 puntos) y Walter Baxley (5), que con un triple lejano provocó que rápidamente “Sepo” Ginóbili pidiera minuto para su equipo, que comenzó dubitativo en ataque, ante la defensa “Cervecera”. En la reanudación, un segundo robo de Vildoza continuó achicando distancias (26-32).
Bahía Basket, con Nocedal descansando, atacó desprolijo ante una defensa de Quilmes que se ajustó mucho más, con Maciel “fajando” bajo el aro, Vildoza logrando ganar el rebote (4), obligando al rival a ataques forzados que generaron varias pérdidas. Ante las dudas del rival, que bajó notablemente sus porcentajes, Baxley continuó con su noche impecable: 9 puntos consecutivos, incluido un triple y un robo, más un doble de Gallizzi para igualar por primera vez el juego en toda la noche: 37-37 a 3 minutos del descanso largo.
El norteamericano aportó cuatro puntos más (18 en todo el parcial; 28 en toda la noche hasta allí) para replicar las ofensivas de Bahía Basket. Con mejor estado anímico, y un panorama mucho más favorable, Quilmes se fue a vestuarios 41-41 ante Bahía Basket, para barajar y dar de nuevo.
El tercer segmento comenzó favorable para Quilmes, que salió a jugar decidido a buscar a Diego Romero. De entrada, el local pasó por primera vez al frente en toda la noche. Y el misionero impuso su físico en la zona pintada, con cinco puntos consecutivos (46-43). La reaparición de Nocedal (9 puntos seguidos) en la visita puso a los de Ginóbili otra vez al frente (49-53). Pero con la buena conducción de Vildoza, la presencia de Romero, la entrega de Marín y Gallizzi y un doble sobre la chicharra de Baxley, el “Cervecero” ingresó al cuarto final arriba por seis puntos (61-55).
Con el envión anímico a flor de piel, Quilmes salió a jugar el último parcial como dominador del juego. Manteniendo una ventaja interesante en el marcador. El tándem Vildoza-Gallizzi funcionó aceitado, y Tayavek comenzó con 4 puntos para el 68-57, máxima de la noche a favor de los marplatenses.