BÁSQUET

Juan Pablo Chami: El entrenador juninense campeón nacional

Logró el título U17 con Provincia de Buenos Aires en la provincia de La Rioja.

Esta gesta comenzó en Viedma, en noviembre del año pasado. Fue un proceso de selección donde nos costó elegir los jugadores porque la formalidad de dirigir al combinado le llegó al cuerpo técnico casi sobre la hora, como se dice vulgarmente. 

Optamos por sumar jugadores que ya teníamos vistos e ir a ver qué pasaba, porque fue todo muy rápido. Lógicamente intentamos seleccionar lo mejor. Tuvimos un cuadrangular muy irregular. Pero por una cuestión matemática pudimos clasificar en el segundo lugar.

Pasaron los meses y se confirmó la participación en el Campeonato Argentino de La Rioja. En este proceso hicimos una preparación con buen tiempo de cara al final four. Fue muy bueno porque  los chicos habían crecido en lo basquetbolístico y entendiendo lo que era la forma grupal. Eso se vio reflejado después.

Al momento de hacer los cortes, obviamente para cualquier entrenador es la parte más fea. Pero también entiendo que es la parte más humana,  porque hay que usar la palabra justa para decirle al chico que no va a ser parte del proceso. Por sobre todas las cosas decirle que fue lo que le faltó para quedar. Pero todos entendieron.

Esta segunda concentración se hizo en San Nicolás para cambiar un poco el aire, para ver cómo funcionaba. La verdad que en San Nicolás estuvimos muy cómodos en el hotel, nos trataron de maravillas en la cancha de Regatas que nos prestaron para entrenar y eso hizo que todo fluyera mejor.

Jugamos un amistoso con el club Los Andes de Villa Ramallo donde pudimos ver a los chicos con mucho entusiasmo, con muchas ganas. Ellos entendieron el mensaje desde el primer  día que había que hacer un equipo, que había que mostrarse siendo parte de un equipo y no individualmente. Generalmente se piensa que se tienen que mostrar ellos y que pase a segundo plano el grupo, pero lo importante es jugar en equipo con o sin la pelota. Eso lo hicieron muy bien. 
Fue un acontecimiento para la ciudad que vaya la selección, los chicos del club de Regatas iban a ver los entrenamientos, íbamos por la calle y la altura de los chicos llamaba la atención y les preguntaban cosas. Fueron muy solidarios con nosotros, no nos hicieron faltar nada. Eso es fundamental para una concentración de este tipo porque los chicos tienen que estar bien para poder rendir mejor posteriormente en la cancha.

A La Rioja llegamos con mucha expectativa. Se veía un grupo muy sólido, muy unido. Éramos todo uno . Encaramos el primer partido con Tucumán que pudimos ganarlo aun cometiendo muchos errores en el cierre los que se fueron corrigiendo durante el torneo. 
Recién el triunfo con Tucumán lo valoramos después de ganarle a Febamba. Creo que del Final Four fue el equipo más aguerrido, que más entendió el mensaje del entrenador, que más propuso y que más presionó. En los tres partidos presionó los cuarenta minutos y eso es para destacar.

Después de ganarle a Tucumán tuvimos la sensación que faltaba un montón porque la verdad que ni estábamos a mitad de torneo. 

Luego vino el partido con Febamba que fuimos solidarios, le sacamos diez puntos y estábamos con esa tranquilidad que no nos iban a dar vuelta el juego. Eso se lo fui transmitiendo a los chicos, inclusive de no andar efusivos o a los gritos porque eso por ahí contagia mala energía.

Llegando a la final el último día yo miraba el ánimo de los chicos e internamente sabía que iba a ser difícil perder el partido, por cómo estaba el grupo y por sobre todo como estábamos haciendo las cosas.

Creo que dentro del torneo no solo fuimos regulares, sino que fuimos creciendo de menor a mayor. Desde el primer partido al último lo hemos sabido resolver de la mejor manera.

Ahora hay que disfrutar esto. Por ahí no se toma la dimensión de lo que es ser campeón Argentino. Uno lo dice, lo escucha pero todavía no caigo. Tanto a mí como al cuerpo técnico nos sirve para seguir trabajando, para seguir aportando nuestro granito de arena en la Provincia, que al fin y al cabo es lo que queremos que el básquet de la Provincia siga creciendo.

Que los procesos que vengan de acá en adelante sean lo más prolijo posible. Tratar como cuerpo técnico de quitarle la presión a cualquier chico que venga, porque internamente cuando se va al seleccionado y se sabe que se puede quedar afuera por algún corte, inconscientemente se genera presión interna. Creo que dejamos un mensaje de contención, absorbimos la presión el cuerpo técnico que era lo que correspondía y dejar que los chicos hagan el mejor juego posible y se diviertan dentro de la cancha, porque en definitiva los jugadores no dejan de ser chicos.

COMENTARIOS