Jonatan Slider, la figura de Argentino en la primera parte del campeonato.
LIGA NACIONAL DE BÁSQUETBOL

Argentino de Junín cierra el año con una campaña prometedora

El Turco está en el lote de los del medio de la tabla posicional, con 6 partidos ganados sobre 15 presentaciones. Este jueves reanuda su participación en el campeonato ante Hispano Americano de Río Gallegos.

Argentino inició una nueva temporada de la Liga Nacional de Básquetbol que fue sacada con “tirabuzón” a las autoridades nacionales por parte de la Asociación de Clubes de Básquetbol.
La situación en el país no daba para más, la gente ya no se quedaba más encerrada y los jugadores presionaban para trabajar dado que venían golpeados de los abruptos cortes de contratos cuando inició la pandemia en el mes de marzo de 2019, que –si bien fueron consensuado- fue un duro golpe para sus bolsillos.
Una vez más, la entidad del barrio Las Morochas formó un equipo modesto dentro de sus posibilidades económicas y sin poner en riesgo el patrimonio del club, fiel a una línea de trabajo que hace varios años a esta parte viene llevando a cabo.
Tras ratificar la continuidad de Matías Huarte como entrenador del plantel profesional, renovó los contratos de Juan Cangelosi, Jonatan Slider y Valentín Burgos. Hasta acá la primera parte.
Incorporó al base juninense Mauro Araujo, trajo de la ciudad de Chivilcoy a Santiago Barrales y luego sumó a Agustín Pérez Tapia, Juan Ignacio Laterza y José Peralta. Esto más los juveniles del club: Enzo Filipetti, Agustín Cavallín y  Martín Sekul.
Faltaba ocupar el lugar de la ficha extranjera. Luego de ver varios videos, el entrenador Matías Huarte se decidió por Antoni Vicens Morey, un jugador español que por primera vez incorporó el club en su historia basquetbolística.
Hecho el equipo, hubo que pararlo en la cancha, hacerlo jugar y fundamentalmente ganar.
Y eso es lo que viene haciendo Argentino en la primera parte del campeonato. 
Sacrifico, trabajo y solidaridad. Estas tres sumas de voluntades son las que lleva adelante el equipo que marcha en la mitad de la tabla posicional del campeonato, con algunos partidos que quedaron en el tintero con un sabor a victoria que no fue en el final.

La competencia
A pesar de las derrotas tempranas, el inicio fue prometedor. Perdió de movida contra Gimnasia y Esgrima de Comodoro Rivadavia 82 a 71 haciendo un buen papel y en el segundo juego chocó contra San Lorenzo. Lejos de ser un “cuco”, los de Boedo mostraron falencias que Argentino aprovechó al máximo y peleó el partido hasta el cierre. No pudo en la última bola y cayó por 80 a 78.
Luego vino un mal juego contra Peñarol de Mar del Plata –con esos resultados que duelen- en el que no pudo hacer pie en todo el partido y cayó 92 a 71. Fue el día que tuvo un debut prometedor el pivot español Toni Vicens con 22 concreciones.
Pero enseguida llegó la primera victoria. Fue ante el local, Obras Sanitarias de la Nación, por 84  a 83 en un partido que dominó de punta a punta, con algunas turbulencias en el final. No mereció perderlo y fue un justo ganador.
Luego vino la debacle del campeonato. Buena parte de los participantes se contagiaron de Covid 19 y, tasa tasa, cada cual a su casa. Mandaron de vuelta a las delegaciones a su lugar de origen.
Pero  rápidamente se movieron las autoridades nacionales del básquet con las del Gobierno y, después de las Ventanas FIBA, se reanudó el campeonato. Eso sí, una delegación por hotel.
Y la vuelta a la competencia no pudo ser más auspiciosa. Argentino le ganó nada menos que a Instituto Central Córdoba por 81 a 69, con un estupendo juego de Jonatan Slider (23 goles). 
Al día siguiente cayó contra Ferro 75 a 74, equipo que tuvo a maltraer todo el partido y no lo pudo cerrar. Acto seguido Atenas le asestó otro golpe (86-84).
Pero, si se quiere, son dos resultados que se pueden ver con otros ojos. La diferencia es exigua y si mejora el Turco el resultado en los juegos de vuelta, la historia cambiaría radicalmente. Es cuestión de tiempo.
Pero volvieron las victorias y fueron por partida doble. Contra Oberá Tenis Club 84-77 (con Mauro Araujo como figura) y ante La Unión de Formosa 92-86 (en un juego sensacional de Juan Cangelosi).
Posteriormente, llegó el Club de Regatas Corrientes. Un frontón. Fue derrota por 95 a 73. Y San Martín de Corrientes, igual, a pesar de que Argentino mejoró sustancialmente el rendimiento en la cancha.
Se veía vislumbrar el partido ante Libertad de Sunchales, un rival directo por la permanencia. Argentino planteó bien el juego y sacó adelante un resultado “chivo” en otra presentación formidable de Jonatan Slider: 71-64.
Y al día siguiente el Turco dio el batacazo ante Comunicaciones de Mercedes, que había incorporado nada menos que a Robert Battle, con otros dos americanos rutilantes: Austin Williams y Jordan Adams. Le ganó con autoridad 91 a 83, con 24 goles de Jonatan Slider, figura indiscutida del equipo.
Los últimos dos partidos del año fueron derrotas ante rivales superiores. Olímpico de La Banda 101-97 en suplementario, en el que casi Argentino lo gana en el tiempo reglamentario y Quimsa 90-57, que el equipo se relajó totalmente, además de sentir el esfuerzo del día anterior.
En suma, el balance es alentador. La competencia no da respiro –más que el de las fiestas de fin de año- y la actividad vuelve el jueves 7, oportunidad en la que Argentino enfrentará a Hispano Americano de Río Gallegos, otro rival de cuidado.
Posteriormente el rival será Weber Bahía Basket, el quinteto del sur de la provincia de Buenos Aires que no puede levantar cabeza en esta Liga Nacional de Básquetbol, e intentará cambiar de rumbo para este 2021, de cara al embalaje final del torneo.