Y un día llegó el momento de la despedida…
Tanto silenciosa como meditadamente tomé la decisión de poner un punto en mi historia como conclusión de ciclo, a una trayectoria como Director Técnico/Entrenador de Básquetbol, que, orgullosamente estuvo sustentada en parámetros que intenté mantener de forma sostenida y tenaz en más de 45 años de actividad, y que se me permitió conservar en forma inalterable: “respeto”, “valores”, “responsabilidad”, “convicciones”, “ Interpretar las necesidades y posibilidades de mis dirigidos”, “ofrecer principios elementales renovadores y superadores para que mis equipos pudieran ser competitivos”, etc.
Como también un día…
Me tocó acceder accidentalmente a un mundo –el de la enseñanza deportiva- (para lo cuál no me había preparado); del cuál pude haber sido un alumno avanzado, que se fue formando y aprendiendo de mis alumnos (los jugadores); que con su frescura, inquietudes y dedicación me fueron ayudando a capacitarme, a progresar y a entender la profesión maravillosa que me iba a cobijar por décadas.
En tal sentido y como corolario, un agradecimiento infinito a todos los que confiaron y me comprendieron:
A los Clubes; Los Indios (durante 28 años), Ciclista (6 meses) y Junín (mis últimos 17 años).
A la memoria de mi gestor (como jugador y Entrenador) Mario Alfredo Pugliese –ex -Directivo y ex -Presidente del Club Los Indios.
A la Universidad Nacional del Noroeste de la Pcia.de Bs.As. que por mis antecedentes como Entrenador, confió y me designó durante cuatro años como Coordinador de Sede de la Escuela Nacional de Entrenadores –Sede Junín.
A la Asociación Juninense de Técnicos en Básquet, entidad que me tuvo entre sus fundadores y Presidente durante más de veinte años.
A los muchos Dirigentes de las distintas Instituciones, que me respetaron y reconocieron.
A los Presidentes y Sub Comisión de Selecciones de la Asociación Juninense de Básquetbol que me eligieron y también me sostuvieron.
A los Arbitros (de todos los tiempos), por la comprensión y el respeto.
A mis colegas (los Entrenadores) que también colaboraron con mi formación y crecimiento.
A mis colaboradores (Ayte.Técn. y Prep.Fís.) que siempre me asistieron con mucha profesionalidad.
A los jugadores, ”fundamentalmente”, que me ayudaron en el día a día, me exigieron crecer con formación y lograron que fuera reconocido por nuestra comunidad deportiva.
Al periodismo, espacio que transito y acompaño desde hace mucho tiempo.
Y cuando cito el término comprensión, A MI FAMILIA, que me permitió, entendió y respaldó mi gestión con mucho amor, pasión y respeto.
El 20 de diciembre de 2015, dejé una de las tareas más lindas que me tocó emprender, -la de ser Entrenador de Básquet-, pero ¡ no dejo el básquetbol !! , sólo un cambio de funciones, también sumamente importante como lo es la de Director del Departamento Básquetbol del Club Junín, a quién agradezco eternamente que sigan confiando en mí.
Gracias, muchas gracias….!! a mis padres (que me acompañan desde algún lugar…), a mi esposa y a mis tres hijos, por el amor, el respeto, la comprensión y el apoyo de siempre y, a toda la sociedad basquetbolística por estos hermosos años vividos, les dejo un beso y un fuerte abrazo.
Dario Lujan Racero
Entrenador ENEBA – Nivel 3
Direct.Técn. Nac. “A” –
CODITEP.
FIN DE UNA ETAPA
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