El reconocido preparador de chasis en el Turismo Carretera, Alberto Canapino, y padre del cuatro veces campeón de la categoría, Agustín Canapino, murió ayer, a los 57 años, víctima del COVID-19.
Canapino trabajó durante su trayectoria con destacadas figuras de la disciplina, como Luis Rubén Di Palma y Juan María Traverso, y se encontraba internado desde hacía algunos días en el Sanatorio Otamendi de la ciudad de Buenos Aires.
Su muerte fue difundida, en primer lugar, por el dirigente de automovilismo y expresidente de la Asociación de Pilotos de Automóviles de Turismo (APAT), Hugo Paoletti.
Oriundo de la ciudad bonaerense de Arrecifes, inició sus actividades en la preparación de vehículos con apenas 25 años, en 1982, cuando le otorgó su impronta a una motocicleta Honda de 100 centímetros cúbicos, con la que compitió en el Campeonato Argentino de velocidad de 125 cm3.
En su pueblo natal, semillero inagotable de figuras del automovilismo nacional, conoció Luis Di Palma, en 1986, para trabajar en el Dodge 1500 del TC 2000. Fue su primera experiencia laboral en el ambiente automovilístico.
A finales de los '80, comenzó a trabajar con Traverso en el equipo Berta Sport del TC2000 y consiguió su primer título (1988), para ser ascendido a director técnico. Al año siguiente, Miguel Angel Guerra (que corrió en Fórmula 1 en 1981, con Osella) se unió al conjunto y logró el campeonato.
A principios de los '90, fue requerido para desarrollar el modelo Volkswagen Carat del TC 2000, con Guillermo "Yoyo" Maldonado como piloto. En 1994, la marca francesa Peugeot lo contrató para iniciar el proyecto del equipo oficial TC 2000, con dos viejos conocidos: Traverso y Guerra.
Al año siguiente, consolidó su sociedad con el adiestrador de motores, Jorge Pedersoli, para lograr el equilibrio exacto y permitirle al "Flaco" de Ramallo alcanzar los títulos de TC y TC 2000.
Años después, el arrecifeño empezó a trabajar con otro múltiple campeón del TC: Guillermo Ortelli.
En 2005, comenzó a moldear la carrera de su hijo Agustín, que debutó en la monomarca Copa Megane y con quien luego compartió equipo y trabajó para adjudicarse el primer título de TC en 2010.
Luego, Alberto apostó a consolidar su propio taller (Centro Tecnológico Canapino), con base en Arrecifes, lo que llevó a su hijo Agustín a repetir los campeonatos de Turismo Carretera en 2017, 2018 y 2019, todos con Chevrolet.
Actualmente, se encontraba comandando el equipo oficial Chevrolet YPF del Super TC2000 con su hijo Agustín y Bernardo Llaver como pilotos.
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